• Spotify
  • Mapa Covid19

Guillermo Appendino

El Trébol, Argentina

Antoine Marie Jean-Baptiste Roger Conde de Saint-Exupéry, hubiese sido igualmente el brillante y quizás algo más breve Saint-Exupéry, habiendo escrito solamente su obra El Principito en 1943; Maradona hubiese sido el magistral Diego Armando habiendo solo convertido aquellos dos goles a Inglaterra en 1986; Queen seguiría siendo la legendaria banda habiendo compuesto únicamente Don’t Stop Me Now, y Borges habría sido la misma excepcional figura de la literatura con no haber escrito más que las diez páginas de Tlön, Uqbar, Orbis Tertius. O por lo menos, así sería para mí.

Sin embargo, muchas personas son partidarias de lo cuantitativo. Compositores que crean decenas de intrascendentes canciones por año, estudiantes graduados de cuatro o cinco carreras poco útiles, hombres y mujeres con dos o tres cobardes amantes, periodistas y humoristas con grandes cantidades semanales de mediocres publicaciones, etc.

Personalmente, prefiero lo cualitativo a lo cuantitativo, pudiendo decir que para casi todo. Y si no se lograse o encontrase lo cualitativo en algo, entonces tampoco contará con sentido alcanzar lo cuantitativo en ello.

Para quienes nos apasiona la escritura, valdría la pena ocuparse en crear un solo y único buen libro, por más que esto llevase toda una vida. Y de igual manera con todo lo demás.

Salvo raras excepciones, habrá que optar por cantidad o calidad en cualquiera de los aspectos de la vida, donde cada una de estas dos condiciones tendrá incidencia directa sobre la otra. Por mi parte, insisto: prefiero lo poco, pero bueno y lo escaso, pero superlativo.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *