• Spotify
  • Mapa Covid19

Editorial

¡Emilio Zebadúa en apuros!

Finalmente, no hay otra explicación, pero todo indica que a Emilio Zebadúa se le acabó la protección que quién sabe quién, le venía proporcionando para no ser llamado a cuentas por lo de la “estafa maestra”.

Emilio Zebadúa no es una pieza clave para el conocimiento de lo que pasó con más de 5 mil millones de pesos de SEDESOL y de SEDATU, más bien es la clave, porqué él fue él que operó las fuentes de financiamientos, la mecánica para su enrutamiento, la comprobación anticipada y la garantía de la llegada a su destino del dinero.

Independientemente de que se trata de cubrir el destino final del dinero, en la disposición de este para las campañas del PRI, alguien en lo material recibió ese dinero, y, de entrada, se quedó con él.

El plan era precisamente que este o estos personajes, priistas o no recibieran estos dineros.

Para tal efecto Emilio Zebadúa habilitó una casa, para operar desde la recepción inicial del dinero hasta las comprobaciones.

Desde esa casa, por ejemplo, se le envió dinero, más de 200 millones de pesos a la Navor Ballinas, rector de la Universidad Politécnica de Chiapas. Se le instruyó lo que tenía que hacer aparte de recibir el dinero.

El recibiría el dinero y con su equipo “subcontrataría” a empresas previamente señaladas, más de alguna “de fachada”, y les entregaría parte del dinero.

No había necesidad de comprobar nada, ya que todo habido documentado por el equipo de Emilio Zebadúa.

De esta manera se fueron cocinando más de 5 mil millones de pesos.

Luego astutamente, una vez que recibiera “el pitazo” de lo que se venía logra obtener un amparo en Tapachula, Chiapas, para evitar ser detenido y hasta interrogado por la Fiscalía General de la República.

Sin haber solicitado y sin haber sido declarado “testigo colaborador” se dedica a pasarla bien en su “ranchito de 40 millones de pesos”, que está a nombre de su chofer en la costa chiapaneca, mientras Rosario Robles “su jefa era detenida”.

Hasta que un juez federal le negara de manera definitiva al ex oficial mayor de Sedeso y Sedatu, Emilio Zebadúa González, una petición de amparo en contra de cualquier orden de captura, y la confiscación de bienes como parte de la investigación que realiza en su contra la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Siedo).

A través de la lista de acuerdos del Consejo de la Judicatura Federal se dio a conocer la resolución judicial en la cual se le niega la protección de la justicia federal a Zebadúa González, quien ha solicitado a la Fiscalía General de la República (FGR) que le permita obtener beneficios jurídicos a cambio de entregar información que inculpen a Luis Videgaray y la ex secretaria de Desarrollo Social (Sedeso), Rosario Robles Berlanga, en la llamada Estafa Maestra, que consistió en el desvío de más de cinco mil millones de pesos del erario federal.

Desde luego Emilio Zebadúa sigue insistiendo en “ofrecer sus servicios como testigo colaborador” para “hundir a Luís Videgaray. Sin embargo, suena ilógica su oferta y sin sustento porque Videgaray nunca fue jefe de Rosario y de Zebadúa. Y tampoco cumplió tareas priistas de coordinación y financiamiento de la campaña de Alfredo del Mazo en el estado de México.

Ahora todo su equipo está en apuros, incluso personajes como Navor Ballinas de la Universidad Politécnica de Chiapas, que si participó en la “Estafa maestra”.

Es importante construir la verdad, pero no inventarla solamente para señalar culpas a diestra y siniestra.

Conocer y confirmar la verdad sobre este robo al erario público, permitirá además recuperar el dinero, y hasta es posible, si es cierto que nada tuvo que ver, exonerar a la propia Rosario Robles. Por eso Zebadúa está en apuros, pero es la clave de esto este enredo que se ha llevado 5 mil millones de pesos de los pobres mapas pobres del país.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *