Edén Gómez Bernal/ Diario de Chiapas
Desde hace más de 30 años, doña Edelmira Nájera Peña se ha dedicado a la venta de disfraces tanto para niños y niñas, como para adultos; sin embargo, en este año la festividad de Día de Muertos tuvo un giro distinto, puesto que la pandemia de Covid -19, amenaza las ventas de este 1º y 2º de noviembre.
Nájera Peña apuntó que, si bien las ventas de años anteriores se han duplicado, para este 2020 su temor era no vender, aunque señaló que muchas familias planean festejar en casa y los disfraces son pieza clave para dicho encuentro.
“Esta tradición ha sido de todos los años, es una fiesta familiar, es una fiesta para celebrar a nuestros seres queridos que ya se adelantaron, y en este año tan difícil vemos que vienen con mucho entusiasmo para celebrar en casa”, explicó la comerciante.
Para este 1º y 2º de noviembre esperan un repunte en sus ventas de hasta un 60 por ciento, una meta que creían no poder alcanzar; sin embargo, debido a la situación las familias tienen que ingeniárselas para poder convivir sin descartar las recomendaciones de las instancias de salud y así continuar con una de las tradiciones más queridas de México.
Con doña Edelmira se pueden adquirir artículos desde los 60 hasta los mil 500 pesos, para caracterizarse de su personaje favorito, “tenemos vestidos, overoles, máscaras, maquillaje, pelucas, de todo lo que requieren para un bonito disfraz, lo importante aquí es disfrutar en familia”. Pidió a la población a quedarse en casa, evitar exponer a los niños y niñas, y tomar la idea de festejar en su domicilio.
