• Spotify
  • Mapa Covid19

El gobierno criminal de Viridiana Hernández

Letras Desnudas

Mario Caballero

El gobierno criminal de Viridiana Hernández

Por su conducta, Viridiana Hernández Sánchez entra en la lista de los déspotas electos de nuestro tiempo. Es una mujer intolerante, mezquina, corrupta, que anula la oposición a punta de balazos; acota la libertad de manifestación y busca por medios nada ortodoxos subvertir la paz del municipio que gobierna, suponiendo que es ella la que manda en Simojovel porque hay rumores de que quien en verdad lleva la batuta es su esposo, el síndico Gilberto Martínez Andrade.

Viridiana Hernández es un personaje emanado del Partido Verde Ecologista de México, pero no es una figura que se haya hecho a sí misma, sino es creación de su marido.

El esposo, originario de Veracruz, fue tesorero municipal en la gestión anterior, en la que fue acusado de amasar una gran fortuna con recursos del erario a través de componendas con proveedores y dueños de restaurantes de la localidad. Quiso ser candidato a la alcaldía en 2018, pero al no tener una respuesta positiva por parte de la dirigencia estatal del PVEM decidió impulsar a su consorte, una dama sin méritos.

Una vez lograda la postulación, Gilberto Martínez operó políticamente en el municipio con militantes de la CIOAC. Fueron decenas de personas que cobraban quincenalmente en la nómina del Ayuntamiento de Simojovel. Por si se lo pregunta: sí, eran aviadores.

Durante la campaña electoral, los trabajadores del Ayuntamiento denunciaron que los operadores de Martínez les ofrecían un apoyo económico de mil 500 pesos a cambio de votar por Viridiana. Los recursos correspondían al programa de empleo temporal. Por otro lado, se dice que el dinero que había sido destinado para pagar adeudos con proveedores y los sueldos de los empleados municipales también fue desviado para la compra de votos.

Una revisión del Órgano de Fiscalización Superior del Congreso del Estado descubrió que Gilberto Martínez se hizo de muchos bienes siendo tesorero municipal, como ranchos, ganado de raza, vehículos, terrenos, entre otros.

INCOMPETENCIA Y CORRUPCIÓN

Viridiana Hernández, a la par de su incompetencia, presume una vida de lujos. Mientras ella se transporta en camionetas del año, viste ropas de diseño exclusivo, bolsos finos, joyas y vive en una residencia con todas las comodidades, sus gobernados sufren pobreza y hambre. Hay cientos de familias que no se pueden procurar una alimentación diaria, pero la alcaldesa tiene hasta para disponer de una oficina en Tuxtla Gutiérrez, donde atiende los asuntos del municipio a través de WhatsApp y videollamadas.

La emergencia de salud que actualmente atraviesa el país requiere de la responsabilidad de los gobernantes. Pero a la alcaldesa Hernández Sánchez no le interesa. En los meses que llevamos de pandemia, no ha entregado apoyos económicos ni despensas a las familias vulnerables. A eso se suma la falta de agua potable en las colonias. La situación es tan grave que la gente de escasos recursos ha tenido que ir a los arroyos para abastecerse.

Según cifras del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (Inafed), casi el 32% de la población de Simojovel es analfabeta, un aproximado de 12 mil 800 personas. En cuanto a los índices de marginación, ocupa el lugar 37 a nivel estatal y 35 a nivel nacional. En cuanto a los servicios en la vivienda, el 1.17% no tiene drenaje ni servicio sanitario; 1.83% carece de energía eléctrica; 12.64 no tiene agua potable; 74.75 vive con algún tipo de hacinamiento y el 10.33 por ciento tiene piso de tierra.

¿Dónde están los millonarios recursos del COPLADEM y de otros fondos? La respuesta es simple: en la corrupción.

El gobierno de Viridiana Hernández – ¿o de Gilberto Martínez? – es enemigo de la transparencia y la rendición de cuentas. Desde que empezó el trienio no ha informado a la población del Plan Municipal de Desarrollo, ni del contenido de los resolutivos y acuerdos aprobados en Cabildo, sobre las actas de sesiones y ni siquiera de los controles de asistencia de los integrantes del Ayuntamiento, a pesar de que es una obligación para los municipios establecida en el Artículo 78 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de Chiapas.

Al asumir el cargo lo primero que hizo Viridiana Hernández fue nombrar a su esposo síndico municipal en un artero acto de nepotismo. Ambos son acusados de desviar recursos públicos en obras fantasma, como la construcción de dormitorios que no existen, el pago por la reparación de tramos carreteros que están abandonados, así como en la entrega de apoyos que nunca se han ejercido. Hay denuncias de obras inconclusas en más de 18 ejidos.

Desde el año pasado, los propios trabajadores del Ayuntamiento dieron a conocer listas apócrifas de beneficiarios de programas sociales del gobierno federal, lo que indica un claro desvío de recursos. Además, empleados de las áreas de Obras Públicas y Tesorería, señalan que una de las principales cómplices de la pareja presidencial es una tal Edgali López Hernández, quien funge como secretaria particular de la alcaldesa y es la encargada de comprobar los gastos superfluos e inexistentes con facturas compradas.

Actualmente, Simojovel ocupa el tercer lugar a nivel estatal con más deuda pública ante la Auditoría Superior del Estado, con más de 50 millones de pesos del ejercicio 2019 y, hasta el momento, no ha entregado la Cuenta Pública de ese mismo año.

CRIMEN ORGANIZADO

Creo que la acusación más grave sobre la gestión de Viridiana Hernández es la de presuntos nexos con el crimen organizado.

En los últimos dos años, ese municipio se ha convertido en un corredor de droga proveniente de Rincón Chamula y San Juan Chamula. Derivado de eso es la proliferación de cantinas que sirven para disfrazar la venta de estupefacientes. Lo que viene a empeorar más la situación es la disputa por la plaza entre las diversas organizaciones criminales que operan en el lugar. Ha habido asesinatos a plena luz del día, como la de Marcos Gómez Mendoza, quien fue atacado a balazos en el interior de la cantina de su propiedad. Se dijo que el móvil fue un ajuste de cuentas. Antes había sido abatido a tiros una persona de nombre Lucio “N”, en la puerta de su domicilio.

Los habitantes denuncian que la Policía Municipal está coludida con la delincuencia organizada. Dicen que son los propios agentes del orden los que informan de los operativos y cobran derecho de piso para dejar trabajar libremente a los narcomenudistas.

El 10 de junio de 2019, un grupo de personas salió a las calles a exigir el cumplimiento de las promesas de campaña y bloquearon la capilla de San Antonio de Padua. Hernández Sánchez, en lugar de establecer el diálogo, envió un grupo paramilitar en el que también participaron policías municipales armados para desbaratar las protestas. En el ataque resultaron cinco heridos y no le importó a la alcaldesa que entre los manifestantes se encontraran mujeres y niños. Ese es uno de los muchos casos.

TIERRA SIN LEY

Simojovel subsiste en la ingobernabilidad. La tierra del ámbar pasó a ser una tierra sin ley, donde la presidenta municipal y su esposo se enriquecen con los recursos del pueblo y mantienen el control del municipio respaldados por paramilitares, a los que se les acreditan varios asesinatos en la región. ¿Quién de las autoridades estatales les pondrá un alto? ¡Chao!

@_MarioCaballero

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *