Marco Alvarado / Diario de Chiapas
“Los veladores no pueden actuar como si fueran autoridad y es un problema que aumentó en los últimos meses”, lamentó Rosario Cepeda, habitante de esta ciudad y vecina de la colonia Xamaipak.
Como ella, cientos de habitantes están preocupados por el robo a sus vehículos, los famosos “cristalazos” que están ocurriendo a cualquier hora del día.
Igual que en la rectoría de la Unicach, en esta colonia ubicada a pocas cuadras de ahí, los ladrones acechan con total descaro, pese a que los habitantes se pusieron de acuerdo para contratar vigilantes.
Sin embargo, los rondines que realizan los cuidadores no han servido para que la delincuencia disminuya, y aunque nunca pensaron llegar a tal extremo, también se unieron a las colonias que tienen una manta de advertencia de linchamiento.
“Los vecinos estamos preocupados porque no es una colonia que esté en la periferia, estamos junto al bulevar y pese a ello no tenemos seguridad ni manera de defendernos”, apuntó.
A la incomodidad de ver cómo su espacio habitacional ha sido “devorado” por bares y cantinas, suman también los constantes robos a vehículos, y el temor de que esta tendencia aumente hacia las viviendas.
“Mucha de la gente que vive aquí ya es de edad avanzada, entonces nos da miedo que estén solos y algo les suceda”, alertó.
