José Cancino/ Tapachula
La nueva caravana de migrantes rompió este jueves el cerco de seguridad en la frontera Honduras- Guatemala y buscará burlar el cinturón de seguridad implementado en la franja fronteriza con México.
Los más de mil 500 hondureños, que a su paso hacia México anexan a más personas a esta caminata que pretende llegar a Estados Unidos, se ha dividido en dos grupos y unos marchan hacia Tenosique, Tabasco, mientras que otros se dirigen a la frontera Tecún Umán – Ciudad Hidalgo.
Ambos pasos fronterizos hacia México son vigilados por elementos de la Guardia Nacional y el Instituto Nacional de Migración (INM).
En los márgenes del río Suchiate, la presencia de militares es escasa y se dedican a custodiar el paso de personas con los respectivos permisos provenientes de Centroamérica. Pese a esto, permanecen atentos ante la posibilidad que el grupo llegará en las próximas horas a la frontera con Chiapas.
La caravana migrante llegaría en medio de una postura negativa para los migrantes por parte del gobierno mexicano, que a través de su secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ha declarado que no se entregarán visas a los extranjeros, sólo solicitudes para regularizar su estancia en el país y permanecer en México sin poder avanzar hacia el país vecino.
Desde diciembre de 2018, al menos seis caravanas han ingresado por el puerto fronterizo que da acceso a Suchiate; sin embargo, los últimos cuatros contingentes han sido interceptados cuando avanzan por la carretera que conduce a Tapachula.
