Ramiro Gómez / Copainalá
A partir de las 9:00 de la mañana Weya-Weyá inicia su recorrido en las principales calles e iglesias de Copainalá para anunciar el inicio de la cuaresma y que Jesús será crucificado.
Desde muy temprano inicia a danzar, visitando la iglesia San Miguel Arcángel, continúa con los templos Inmaculada, Concepción, San Juan Evangelista, la Santísima Trinidad y Santa Ana.
En esta danza participan, Weya-Weyá, la esposa, dos hijas y dos solteros, novios de las muchachas.
Luciano Vázquez Pérez, presidente del Comité de Cultura Raíces de mi Pueblo, dijo que ayer por la noche culminó la velada y hoy sale a recorrer las iglesias de los barrios de Copainalá.
“Ayer velamos al Weya-Weyá, hubo música, cupsi, tamales, cafés, y sobre todo, los que acompañarán al personaje principal del carnaval, ensayaron sus diálogos que presentarán durante el recorrido que hará el hombre de la montaña, como también lo conocemos esta leyenda en Copainalá”.
Según la leyenda cuenta que este hombre vivía en el pueblo, pero después fue a las montañas, al regresar nuevamente a su comunidad encontró a su mujer en el atrio de la iglesia con sus dos hijas y dos jóvenes solteros, posteriormente inició la conversación entre Weya-Weyá y su mujer.
Weya-Weyá: ¿Ya vine mujer?
Esposa: ¿Y por qué vienes hasta ahora?, tus hijas ya están grandes.
Weya- Weyá: No vine por eso, vine a anunciar la llegada de nuestro Señor Jesús.
Mujer: ¿Qué me trajiste?
Weya- Weyá: Trabajé en las montañas y te traigo pieles y carne de venado. Y tú, ¿Has trabajado la tierra como te enseñé?
Mujer: Si, aquí tengo unos puros que tus hijas hicieron.
Entonces el Weya-Weyá levanta el puro y observa a los cuatro puntos cardinales y se da cuenta que el puro no era de buena calidad y le pega a la esposa con un látigo.
Mujer: Noooo, espérate no me pegues, aquí tengo otro que yo hice míralo.
Weya-Weyá: ¿A ver?
El hombre fuerte elevó el puro a los cuatro puntos cardinales y vio que si era de buena calidad.
Fragmentos del diálogo que presentarán hoy durante el recorrido que hará el personaje emblemático del pueblo de Copainalá.
El diálogo se desarrolla en zoque, y la danza del Weya-Weyá dura alrededor de 20 minutos que consta de tres sones entonados con flauta de carrizo y dos tambores. Y con este ritual anuncia el inicio de la cuaresma previo al miércoles de ceniza.
