M de R / Diario de Chiapas
Gilberto Rodríguez de los Santos busca por tercera ocasión la presidencia municipal de Ocosingo, pero otra vez, como en las anteriores ocasiones, lo hace por un partido distinto. Sin embargo, los escándalos que lo acompañan en su peregrinar lo dejan mal parado y lo más probable es que Morena, partido por el cual se apuntó, pierda más en lugar de sumar.
En 2015 participó por el PAN, pero fue descubierto con la compra de votos desde su casa de operaciones, ubicada en Villa Satélite, lo que a la postre lo llevó a la derrota.
Tras su fracaso, tres años después, ahora bajo las siglas del partido PVEM, cobijado por Héctor Albores Cruz, presidente municipal en esa administración, intentó recuperar la silla municipal.
Sin embargo, a pesar de que ganó la elección interna, al competir con Jesús Oropeza Nájera, éste le ganó la partida compitiendo por Morena, aún con todos los apoyos que le brindó en ese entonces el edil en turno, los líderes en la Selva y el apoyo económico por parte de contratistas que aportaban todo a favor de Rodríguez de los Santos.
Esta elección fue la más polémica, pues después de enterarse que había perdido las elecciones, realizó la toma del IEPC municipal, presionando y señalando un fraude electoral, lo que le llevó a tomar de manera violenta las instalaciones de la presidencia municipal, realizó bloqueos carreteros, alteró la paz en el municipio, situación que no fue novedad pues en la mayor parte de la administración de Albores Cruz se realizaban constantes tomas de presidencia.
Todo esto lo llevó a encadenar una serie de procesos legales, que después de dos meses con alteraciones de la paz social, atentar contra las vías de comunicación, realizar pintas, destrozos en la presidencia municipal, en Xalapa, Veracruz, el órgano electoral acreditaba a Oropeza Nájera como presidente municipal del periodo 2018-2021.
Después de permanecer en silencio, Rodríguez de los Santos aparece buscando nuevamente la silla presidencial, pero esta vez bajo el manto protector de Morena, partido que hizo ganar a Oropeza Nájera.
Después de escribir su propia trayectoria política, lo definimos como ¿obsesión o hambre del poder?, muchos compromisos por cumplir, desde hace tres oportunidades, busca un chance más, esta vez dejando a su partido con el cual tuvo más reflectores (PVEM).
