Rafael Montiel
Ciudad de México
Como se sabe en todo el mundo, el Día de muertos en México es prácticamente un día nacional, es la celebración y el recuerdo que se brinda a nuestros seres queridos que han partido a través de ofrendas, cantos y bailes; es una celebración única y espectacular.
Es por eso que decidimos hacer video con Cornelio Reyna Tercero de la canción “Te vas ángel mío”, un clásico de Cornelio Reyna que se canta en muchos sepelios a lo largo y ancho de nuestro país, y qué mejor que se grabara en uno de los sitios donde estos festejos toman una relevancia muy especial y a donde acuden turistas de todo el mundo: la Isla de Janitzio, Michoacán.
Vestido de negro y siempre dispuesto a saludar y tomarse la foto con quien así lo deseara, Cornelio Reyna Tercero trabajó durante dos días en la grabación de este video, usando como locación la iglesia, el panteón, los muelles y calles de este lugar.
Trabajo especial desarrolló la joven Yunuen Edith, quien portó un traje típico purépecha, diseñado por Helio López, apareciendo en varios instantes del video. Para el acompañamiento musical, estuvo presente el destacado grupo Firme Impacto, originario de Zinapécuaro.
“Este video es muy especial para mí, pues fue ponerle imagen a una canción emblemática de mi abuelo, y fue doblemente especial por el lugar que elegimos para realizarlo. Vivimos una magia, me sentí como en familia en esa isla. Disfruté cada una de las escenas y disfruté presenciar esta hermosa tradición que afortunadamente conservan”, dice emocionado Cornelio Reyna Tercero.
Este video de “Te vas ángel mío” está siendo compartido de manera importante en las redes sociales y quedará en el recuerdo de todos los habitantes de Janitzio, donde por cierto hace más de 70 años se filmó la película “Maclovia”, llevando en los roles estelares a María Félix y Pedro Armendáriz.
Cornelio Reyna Tercero se interpreta a sí mismo en el video, dando a entender que ya pasó a mejor vida y anda cantando en distintos sitios de la Isla de Janitzio, siempre cerca de su amada, sin que ella logre percibir su presencia en espíritu
