Milenio.com / Yareli Rafael
Las arañas violinistas, conocidas por su veneno potente, tienden a refugiarse en lugares oscuros y poco transitados, lo que las hace difíciles de detectar.
En México, su presencia aumenta durante la temporada de lluvias y calor, cuando buscan refugio en hogares, bodegas y rincones poco iluminados.
Para evitar encuentros peligrosos, es fundamental conocer dónde suelen esconderse y tomar medidas de prevención.
¿Dónde se esconde la araña violinista?
De acuerdo con la información proporcionada por el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), la araña “violinista” o “del rincón” tiende a vivir en lugares con calor, por lo que a menudo escogen nuestros hogares para habitar.
Dentro de las casas, se esconde en lugares donde no se han realizado cambios en mucho tiempo, como: cobertizos, áticos, bodegas, lugares oscuros y polvorientos.
La Secretaría de Salud, también menciona: lugares polvorientos, lugares poco aseados, bajo tanques de gas, detrás de cuadros, detrás de cornisas, libreros, armarios, roperos o donde se guarde ropa.
Al aire libre, se esconden en madera apilada o detrás de objetos dejados por ahí.
¿Por qué hay más arañas en época de calor o lluvia?
La Secretaría de Salud informa que la araña violinista es un animal nocturno que puede adaptarse a cualquier ecosistema, pero se distingue por tener lugares preferidos como los ya mencionados.
De esos lugares sale para para cazar, por lo que su actividad aumenta en las noches de verano, donde abunda el calor y la Luna es parte de la iluminación.
A pesar de que puede encontrarse durante todo el año, en la temporada de frío son menos activas, pues su vitalidad disminuye.
¿Cómo es la picadura de la araña violinista?
El estado de intoxicación que produce el veneno de la araña Loxosceles, conocida como violinista o del rincón, se denomina Loxoscelismo.
Según la Secretaría de Salud, hay dos formas principales de esta picadura:
- Loxoscelismo dermonecrótico o cutáneo: esta es la forma más común, ocurriendo en el 84 al 90 por ciento de los accidentes.
- Loxoscelismo Sistémico: esta es la forma más grave y ocurre cuando el veneno alcanza vasos mayores e ingresa al torrente sanguíneo.
- De no ser atendida puede causar la muerte.