Una vida con vida…Gonzalo Escobar Castellanos
Jorge Éver González Domínguez/Chiapa de Corzo, Chiapas [email protected]
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, marzo, 1967.
Hijo de Samuel Escobar Cabrera y Consuelo Castellanos Pérez.
Docente de telesecundaria.
Su amor por las letras inició a temprana edad y la mayor parte de su creación literaria la plantó en la mente y el corazón de sus alumnos, la cual compartió, dentro y fuera de las aulas.
Poeta innato, escribe al amanecer del día.
“Lo que escribo siempre está relacionado al carácter divino, la paradoja, la metáfora, la adjetivación, la prosa, la figura retórica en la cual se hable no del amor filial, me gusta más el amor ágape.
Busco que el lector descubra el verdadero amor y se relacione con mi forma de pensar, perciba mi universo, mi plenitud, mi razón de ser y estar, descubra el verbo amor y la relación que guarda con el concepto de amar.
Escribir me es útil porque hablo del yo interior, del amor y de la búsqueda de mí, del todo y de nada.
Pienso que todo México, aun sin palabras, es arte, es poesía y humanamente nadie puede escribir nada sublime. Nadie sabe la vida, nadie sabe la muerte, aun el dormir, el sueño es misterio, los días por vivir es misterio. Yo soy arte y poesía.
Siento que la escuela no te prepara para el amor y el desamor, para amar, para la muerte.
Quiero que me recuerden como un tipo que salió del pueblo, de gente humilde, que brotó de la tierra y germina del corazón de Dios”.
Gonzalo, ha participado en las antologías: El nucú, caviar chiapaneco; Memorias del Sabinal y La otra arteria.
Autor de los poemarios: Mujercita Vol. I, Mujercita Vol. II.
Actualmente, con un permiso especial por parte de la SEP, para no estar frente a grupo por cuestiones de salud, se acomoda tranquilamente en las ondas del viento a respirar los versos que le llegan en las ráfagas amarillas de la aurora, para darle vida a su vida.
