Edén Gómez Bernal/ Diario de Chiapas
Ante la pandemia que se vive por el COVID-19, se han tenido que buscar mecanismos para la integración social, como el convivio diario, puesto que por los riesgos se tuvo que tener un confinamiento casi total por parte de la mayoría de los sectores.
Ante esta circunstancia, uno de los sectores más afectados fue el de los niños, ya que el no poder acudir a la escuela, ni a sus actividades extra escolares, ha propiciado que algunos infantes tengan daños emocionales y psicológicos.
En este sentido, Alejandra Cortázar, licenciada en intervención educativa y especialista en estimulación temprana refirió que debido a la pandemia se han detectado diversos daños en los niños, quienes resienten de forma considerable el tema del confinamiento.
Señaló que la estimulación temprana es benéfica, va enfocada a niños de 2 meses a 6 años, y es apta para cualquier menor al que se desee potencializar sus habilidades.
El beneficio a través de la estimulación temprana es el desarrollo óptimo y el alcance de las etapas de un desarrollo integral de estos menores.
Ante la pandemia es importante tomar en cuenta diversas alternativas enfocadas a los niños, ya que muchos no han podido tener una convivencia y desarrollo de actividades “normales”, por el confinamiento y las medidas que se tienen que tomar, ya que los niños necesitan la estimulación y su ambiente está siendo limitado, sobre todo en la experimentación y convivencia.
“La gente antes podía ir a los parques, a los niños recién nacidos los llevaban. Ahora, debido a la pandemia esto no se ha podido hacer, por lo que incluso se ha denominado la generación de “bebés pandemia”, ya que no están teniendo una crianza como la que se conoce, por ello el que se tengan alternativas como la estimulación temprana”.