Edén Gómez Bernal / Diario de Chiapas
El transporte público en el capital del estado se ha convertido en un riesgo latente para los usuarios, peatones, motociclistas y automovilistas, ya que las malas prácticas incrementan y la autoridad ha permitido que este problema agudice.
La autoridad municipal ha señalado que por lo menos en 80 por ciento de percances y accidentes viales en Tuxtla, el transporte público está involucrado de forma directa o indirecta.
En esta ocasión, varios usuarios de la unidad 5218 denunciaron poca capacidad, falta de conciencia, exceso de velocidad, agresividad y pésimo servicio por parte de los operadores, por lo que urgieron a las autoridades poner un freno a estas actitudes prepotentes.
Señalaron que las malas prácticas del transporte se vuelven más constantes. “Este chofer iba a exceso de velocidad, mentándose la madre con todos los conductores, rebasando por la derecha, poniéndose en tercera fila, de verdad da miedo subirse a estas unidades”, expresaron usuarios.
Refirieron que debe haber acciones contundentes para los concesionarios de las rutas, sin embargo, también se deja claro que los dueños de las combis están inmiscuidos en este tipo de irregularidades, al contratar a personas incapaces, con poco sentido común, sin ningún tipo de vergüenza, sin capacitación en la atención y manejo.
