A. Marroquín / Diario de Chiapas
Pese a que personal docente de Bochil fue diagnosticado con el virus del SARS-CoV-2 durante la primera semana de clases presenciales, trabajadores de la educación denunciaron que las autoridades los obligan a asistir pese al riesgo de infectarse.
En la escuela primaria “Plan de Ayala” del municipio de Bochil, suspendieron clases presenciales debido a que dos profesores dieron positivo a COVID-19 en la primera semana de clases, sin embargo, aún están haciendo llegar a la institución a 17 docentes, mismos que tuvieron contacto con los maestros infectados, únicamente para cumplir con guardias.
Al preguntar sobre estos casos a la Secretaría de Educación en Chiapas (SE), la dependencia se ha limitado a dar a conocer si existen o no riesgos de contagios, ya que, de acuerdo con el protocolo emitido por la misma institución, sólo acudirían a las escuelas, aquellas con menos de 100 alumnos, además de precisar que se determinaron zonas de acceso, circulación y aislamiento, sin especificar qué proceso han implementado para aquellos centros en donde se hayan registrado casos positivos.
“En riesgo, nosotros somos 18… la maestra se empezó a sentir mal el día viernes, le dieron el positivo el día lunes”.
“La maestra tuvo contacto con los niños de cuarto, quinto y sexto y con nosotros desde el día lunes de la semana pasada… por órdenes de jefatura nos hacen venir”, mencionó un docente de la primaria “Plan de Ayala”.
