Muchos llegan ante las autoridades y rinden declaraciones de acusaciones que no entienden, a las que deben responder sin la presencia de un traductor
Marco Alvarado/Diario de Chiapas
La fabricación de culpables sin la búsqueda de justicia es el problema que prevalece en las comunidades indígenas, aseguró el integrante del grupo de trabajo “No estamos Todas No estamos Todos”, Juan Pablo Nava.
Esta defensoría de los derechos humanos de la población indígena, con un trabajo directo en las poblaciones originarias del estado, ha encontrado que, sistemáticamente, muchos de los encarcelados son víctimas de violaciones a sus derechos, y enfrentan procesos penales en la más absoluta vulnerabilidad.
“Persisten prácticas como las detenciones arbitrarias y la tortura para que se autoinculpen y a partir de ello son víctimas de diversas violaciones al debido proceso”.
Además, muchos llegan ante las autoridades y rinden declaraciones de acusaciones que no entienden, pero a las que deben responder sin la presencia de un traductor, agregó.
“Cotidianamente vemos estos casos, ya sea que se les acuse de robos o de asesinatos, las poblaciones indígenas enfrentan situaciones complejas en la impartición de justicia”.
No obstante, del total de encarcelados, aseguró, ha sido mínimo el porcentaje de aquellos que realmente se vieron involucrados en los hechos por los que fueron encarcelados.
“Se les encarcela porque es la población más vulnerable, son las víctimas preferidas por ser quienes menos derechos ejercen”.
Con la llegada del nuevo gobierno federal, en 2018, no ocurrió ningún cambio “continúan los mismos problemas y el mismo tratamiento para los presos indígenas y la forma como se les encarcela”, aseguró.
