Marco Alvarado/ Diario de Chiapas
El Arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez Castilla, exhortó a que las autoridades migratorias “garanticen el pleno respeto de los derechos humanos de los migrantes”, y que no prolonguen más “su amarga y dramática experiencia en esa cárcel migratoria” donde se encuentran.
Se refirió a los 300 migrantes que fueron llevados de la Estación Migratoria Cupapé II a las instalaciones donde se operaba el programa de combate a la Mosca del Mediterráneo (Moscamed), en el municipio de Chiapa de Corzo.
La Pastoral Social de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, dijo, está preocupada por la situación en la que se encuentran, porque la mayoría de estos migrantes son niños, niñas y mujeres, que permanecen en este lugar como resultado del control migratorio actual.
Al respecto, señaló que le preocupa la dilación de los procesos migratorios que terminan por ocasionar un hacinamiento, lo cual es grave en la actual emergencia sanitaria, y en el caso de la bodega citada, dijo que hay reportes de graves condiciones de alimentación, salud y bienestar, que han sido denunciados desde el año 2019 por organizaciones defensoras de los derechos de la población migrante.
