Edén Gómez Bernal/Diario de Chiapas
El oficio de ser taxista es ya una tradición en la cultura, no solo mexicana sino en varios puntos del mundo, tan así que muchas naciones cuentan ya con la celebración del día del taxista, como México, que cada 7 de mayo lo celebra.
Un oficio que es de disfrutar, difícil, carismático, peligroso, cansado, pero también lleno de satisfacciones, panorama que los propios hombres y mujeres taxistas de la capital chiapaneca viven.
Por ello el que nos demos a la tarea de conocer cómo trabajan, que pasan en un día de labores, los riesgos que corren y hasta como se vuelven psicólogos para algunos clientes que solicitan su servicio.
Enrique Roberto Nuriulu Torres, originario de Tuxtla Gutiérrez, con 21 años de labor en el transporte, y 4 años como taxista, nos platica como es esta noble labor.
Dejó en claro que la actitud de un taxista siempre debe de ser alegre, prudente, pero sobre todo con una intención de servir y salir adelante.
Llegó al transporte por las diversas circunstancias de la vida, con tan solo 17 años inició a ganar sus primeros pesos para poder ayudar a su madre, ya que su padre había fallecido, por ello el que optara por ser taxista.
“Porque no tuve no tuve la posibilidad de estudiar a la edad de mis 14 años falleció mi padre y mi madre sola, mis hermanos igual cada quien por su lado, fue algo complicado y en el momento de la juventud uno a veces dice con esto quedo cuando en realidad a futuro una carrera puede hacer más fácil la vida de cada persona”, dijo.
La modalidad que utiliza Enrique es de 24 por 24 un taxi con número económico 1112, afirma que esta noble labor le permite ganar lo que guste siempre y cuando se trabaje con inteligencia, con dedicación y con servicio.
Mencionó que en esta labor se puede ganar lo que uno se proponga, en la modalidad que lo utiliza se tiene que cumplir con la cuenta, la gasolina y la ganancia, es decir se tiene que ganar un aproximado de mil 100 diarios para tener una ganancia y que esto sea redituable, sin embargo, también esto no es limitante por desde quiere ganar.
ENFERMEDAD DE UN HERMANO…
Le ha ido bien en el transporte, desde que inició ha destacado en los grupos en dónde se ha desempeñado, incluso, se propuso no trabajar después de los 40 años, ya que le iba bien tenía combis y algunas rutas, sin embargo llegó un momento en el que la vida le cambió debido a la enfermedad de uno de sus hermanos, que lamentablemente tiempo después perdió la vida.
“Tengo 38 años yo me puse una meta dije a mis 40 años ya no voy a trabajar y la iba llevando bien pero pues uno no sabe los azares de la vida y te golpea de una forma en la que uno no sabe lidiar, ya que anteriormente tuve buen transporte, colectivos, taxis, pero cuando toca la enfermedad pues ni modo”.
ATENCIÓN AL CLIENTE…
Tras este tipo de experiencias entendió que a la vida hay que darle una buena cara y al cliente una buena atención, por ello hay que ser inteligentes tanto en el humor o malos ratos que se pueda tener por quién contrata los servicios de un taxi.
“El usuario siempre va a tener la razón, él paga, va a ir a dónde quiere, la decisión es uno como taxista si la persona viene agresiva o viene molesta, es mejor tener un poco de paciencia y calma como chofer, porque si me pongo a pelear con un usuario nunca lo voy a ganar y segundo lugar hay que ser inteligente, no hay que luchar con ellos porque de ellos depende uno, aquí esto tiene que ser redituable para los dos, ellos necesita de mi servicio y yo necesito de su dinero”.
INSEGURIDAD…
El ser taxista también implica diversos riesgos la inseguridad, actual es constante lamentablemente ya ha vivido experiencias de asaltos, esta situación fue hace poco más de 2 meses en dónde lo encañonaron, le quitaron el radio y todas las pertenencias que traía, pero afirma fue lo mejor, ya que aún sigue vivo y sigue aquí.
“Sí me han asaltado tuve un percance poco más de 2 meses, iba por la colonia Shanka, cuando una moto me rompió el cristal con una pistola, no puse resistencia, me quitaron el radio, me quitaron el dinero que traía y ya, yo no hice movimiento de nada porque creo que las cosas materiales se recuperan, pero si me hubiera dado un tiro o algo yo hubiera salido perdiendo más”.
A esto dijo que no denunció porque no se gana mucho, no reconoco a los asaltantes, porque iban con cascos negros, moto sin placas, entonces no tuvo mucho sentido, explico, lo que si es que es lamentable que en un domingo a las 9 de la mañana pasen estos asaltos, comentó.
UBER…
Hablar de los taxis y de este servicio urbano, también es hablar de la ilegalidad o de algunas otras modalidades en el transporte tal es el caso más reciente el de UBER el cual ha generado controversia, molestia e incluso enfrentamientos entre la propia autoridad, transportistas y los choferes en esta nueva modalidad de transporte.
Para Enrique, todos tienen derecho a trabajar y Uber no representa un riesgo para su labor como taxista, sino todo lo contrario, él se mantiene tranquilo, consciente y a sabiendas qué ofrecer un buen servicio y de calidad ayuda a que sus clientes lo sigan buscando.
“Nunca me he topado con un Uber y en lo personal no me afecta, porque tengo a mis clientes Ya tengo la cartera de personas que me llaman y solicitan mi servicio, no me podría afectar y yo soy de las personas que lo que es tuyo es tuyo y lo que pase más adelante llueve truene o relampaguee va a estar ahí es tuyo, hay que ofrecer un buen servicio únicamente ganarles a los clientes”.
LOS MOTELES Y SUS MISTERIOS
Dijo que para muchos sectores de la sociedad el tema de los servicios que se ofrecen hacia los moteles es uno de los que mantienen cierta incógnita, sin embargo, dijo lo que pasa en el taxi se queden en taxi pero sobre todo la discreción purulencia y respeto de un taxista a cualquier persona vaya donde vaya, sea un motel o sea cualquier otro lugar, debe mantenerse sobre todas las cosas, iuncluso, mencionó alguno de los moteles que son más solicitados por algunos de sus clientes.
NO ES FÁCIL SER TAXISTA, PERO ME HACE FELIZ…
Finalmente después de este recorrido dijo que no es fácil ser taxista, sin embargo, es un oficio que lo hace feliz y lo mantiene feliz.
