Las conductas más denunciadas en los últimos dos procesos electorales son: ataques en las redes sociales, actos de denostación y descalificación de la mujer en radio y televisión
Marco Alvarado/Diario de Chiapas
La violencia política contra las mujeres en razón de género no está siendo sancionada, pese a que aumentaron los casos denunciados, de acuerdo con el informe cualitativo “Efectos de la violencia política en la vida democrática de la región Sureste de México”, realizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Autónoma de Chiapas (IIJ-Unach).
Chiapas está en la circunscripción electoral con más registros de este tipo de violencia, sin embargo, las sanciones no pasan de ser simbólicas.
En Chiapas existen tres registros catalogados como “ordinarios y grave especial”. Los agresores fueron hombres en el ámbito municipal, en la Tesorería y la Presidencia; y en dos de los casos se determinó la pérdida de la forma honesta de vivir, además de una multa económica y dar vista al superior jerárquico. Mientras que en el tercero no se impuso medida alguna.
De acuerdo con el documento, las conductas más denunciadas en los últimos dos procesos electorales son: ataques en las redes sociales, actos de denostación y descalificación de la mujer en radio y televisión; así como la obstaculización de la participación al interior de los partidos políticos, y en el ejercicio de las funciones.
No obstante, según los casos registrados en el sureste, se advierte que no hay repercusiones administrativas, económicas o jurídicas, mucho menos penal para quien comete este delito, pese a que quienes han ejercido más violencia política en razón de género son aquellos vinculados con la administración pública municipal, destacando los presidentes o presidentas municipales y regidoras o regidores.
