Buró de Crédito
Wolfgang Erhardt, Vocero Nacional de Buró de Crédito
Me encanta el crédito hipotecario, es mi crédito favorito porque además de darte un techo sobre la cabeza puede generarte una plusvalía y puede ayudarte a tener un mejor retiro.
El crédito hipotecario es el préstamo más importante al que puedes aspirar como persona, tanto por el plazo como por el monto del crédito.
La propiedad adquirida a crédito queda en garantía a favor del otorgante del crédito para asegurar el cumplimiento del crédito, así que no debemos de fallar con nuestros pagos puntuales
Antes de pedir tu crédito hipotecario toma en cuenta los siguientes consejos:
1.- Realiza tu presupuesto considerando como base tus ingresos fijos. A ese monto réstale tus gastos mensuales (incluyendo tus compromisos crediticios actuales) y los dineros destinados al ahorro, a la inversión, y a las aportaciones adicionales para tu ahorro para el retiro.
2.- Prepara tu Reporte de Crédito de Buró de Crédito. Para esto necesitas tener actividades crediticias, preferentemente activas, que reporten a su base de datos para generar antecedentes crediticios que les permitan a los otorgantes de crédito evaluarte. Mientras mejores decisiones tomes en el pago y uso de tus créditos, mejor Reporte de Crédito tendrás.
3.- Tómate el tiempo necesario para conocer la oferta crediticia que hay en el mercado para saber dónde te conviene más pedir tu crédito.
4. Ve propiedades para ver que hay disponible pero no des enganches o te comprometas a una operación de compra-venta hasta que tengas tu crédito hipotecario autorizado.
5.- Elige bien el plazo de tu crédito y ten en cuenta que la mensualidad variará dependiendo del plazo, de tu nivel de enganche, y de tu puntuación de riesgo crediticio Mi Score de Buró de Crédito el cual puedes solicitar junto con tu Reporte de Crédito (a mayor puntuación, mejores condiciones podrás obtener por ser una persona de bajo riesgo).
6.- Dentro de la gama de créditos hipotecarios vas a encontrarte con dos tipos básicos: pago o mensualidad fija y creciente. El de pago fijo es aquél que la mensualidad no varía en todo el plazo del crédito. El de pago creciente es aquél en el que la mensualidad se incrementa un porcentaje fijo al año. Pide que te simulen el crédito para ver cómo se comportan los diferentes factores como la relación precio-tiempo-monto de préstamo y elige el que más te convenga.
7.- Es muy importante que leas y comprendas el contrato de crédito hipotecario. En el encontrarás las cláusulas generales, seguros, penalizaciones, fechas de pago, comisiones, etc.
8.- Salvo en algunos esquemas de co-financiamiento en conjunto con una institución del gobierno, los bancos te prestarán cierto porcentaje del valor del inmueble (según el avalúo que ellos realicen). Si te prestan, por ejemplo, el 80% significa que necesitarás un enganche del 20% para completar el precio de la casa. Eso súmale hasta ocho por ciento de gastos notariales. Necesitas empezar un ahorro pero ya para tener ese dinero disponible.
9.- Recuerda incluir en tu presupuesto otros costos importantes el avalúo y la comisión por apertura en caso de que esta última exista (ojo, hay veces que no te los cobran). Contempla también los gatos de mudanza y equipamiento de la casa; así como los costos del predial y de mantenimiento.
10.- Busca que la propiedad se ajuste a tus necesidades, considerando que la plusvalía dependerá de la ubicación de la propiedad, del tamaño, del desarrollo de la comunidad, así como de los materiales de construcción con los que la propiedad fue hecha.
11. Finalmente, recuerda que puedes buscar el obtener el crédito junto con una segunda persona para incrementar así el monto a prestar. Elije bien a esa persona, no te vaya a quedar mal.