Cafetómano
Bernardo Figueroa
La Auditoria Superior del Estado, nació como un ente encargado de fiscalizar el uso adecuado de los recursos públicos de los municipios, en sus primeros años, fue un ente que dependía directamente del Poder Legislativo del Estado, hasta ahí la función del auditor, podría decirse que estaba hasta cierto punto controlada.
Sin embargo, años más tarde, le dieron la autonomía como órgano encargado de revisar las cuentas públicas, dejo de ser el auxiliar del Congreso del Estado, eso comenzó a ser usado por sus titulares para pasar la charola a los alcaldes, que por omisión o tentón no presentaban las cuentas claras como debía ser.
Pero, aun así, durante varios años, la OFSE, se puede decir, funcionaba, sin embargo, con la llegada de Uriel Estrada, propuesta directa de Ismael Brito, las cosas cambiaron, una recua de personajes oscuros que estaban desde la formación del ente, se apoderaron de los resolutivos y primero a espaldas del ignorante auditor nombrado más que por conocimiento, por lambiscón y cargamaletas de Brito.
Las denuncias de los ex alcaldes y de los actuales, van desde las llamadas multas por no entregar las cuentas públicas en los tiempos establecidos; y es que ahí es donde tienen su negocio una serie de personajes perversos que se han enriquecido por la ignorancia supina del auditor.
De acuerdo a las leyes en la materia, la auditoria debe multar a los alcaldes por no presentar las cuentas públicas mensuales, pero primero deben sancionar con llamados públicos a los ediles y estos cumplan, cuando no lo hacen es cuando se les debe de aplicar la voladora, sin embargo, Uriel usa a sus asesores para que sean los encargados de negociar con los alcaldes para que no sean objeto de sanciones.
Situaciones que se asemejan al famoso, no hay condiciones, palabras usadas por auditores que no quieren ir a supervisar obras o avances de obras en municipios como Chamula, Zinacantán, Oxchuc, Pantelhó, entre otros tantos, y entonces negocian que solo se den auditorias de gabinete, situación de que debería estar prohibida para esa dependencia.
Las tarifas por no presentar la cuenta en tiempo y forma, además de los precios para aquellos que terminaron su trienio y que aún tienen cuentas pendientes van desde los “miserables” (así le llama el auditor a esa cantidad) 300 mil pesos hasta los 10 o 15 millones de pesos, esto de acuerdo al adeudo que presenten, la garantía solo expira cuando termine el periodo para el cual fue nombrado Uriel Estrada.
Es decir, los ex alcaldes están comprando inmunidad por tiempo limitado, porque una vez que Uriel se vaya su caso se puede reabrir, pero ellos, según comentaron al CAFETOMANO, confían en que las “gentes” del auditor que ha puesto en lugares estratégicos, queden bien posicionadas, incluso dicen que con lo que paso en Morena, ellos van a seguir mandando.
Uno de los casos sonados fue el del municipio de Oxchuc, en donde el auditor, junto a su padrino Ismael Brito, le jugaron la cabeza al ex alcalde Alfredo Gómez, quien ahora no sabe cómo hacer o que hacer para evitar que sus rivales en amores municipales, lo ventaneen de los apoyos que daba y que no existen comprobantes.
También destaca el caso de Chamula en donde el ex edil Ponciano, se llevó una millonada y dejo hasta tirada la alcaldía, cuando supo que su gallo uno de los Collazo, no podría con la maquinaria priísta que encabezó otro de los Collazo, este no está involucrado en los desmanes de los Collazos coletos.
Y si seguimos sumando tenemos el caso de Berriozábal en donde el ex edil y ahora el actual no presentaron cuentas claras en la compra de predios que según serian para obras de impacto social, más bien parece que fueron para impacto de sus bolsillos.
La lista es larga, faltaría papel y tinta para enumerar los casos de sospechas de presunta corrupción que hay dentro de la mal llamada Auditoría Superior del Estado, que como explicamos en el inicio, se debe al Poder Legislativo en coadyuvancia con el Ejecutivo, pero el auditor Uriel, nunca se presenta en el Congreso y como los diputados son del Jet Set, no conocen de leyes menos que sepan de la ASE.
En las próximas horas se dice que habrá cambios y movimiento en varias dependencias, tras los resultados de las elecciones de consejerías de Morena, en donde la mayoría son funcionarios, y se espera que en breve renuncien para ocupar espacios dentro del partido guinda, y en esos rumores se escucha que Uriel Podría salir huyendo buscando impunidad.
La realidad es que la ASE, ha sido un ente público que se pervirtió, es necesario una oxigenación de todos los ejecutivos de la misma, la inoperancia es el resultado de la ambición de su titular y la consecuencia es la falta de recursos en muchos ayuntamientos que tiene que pagar altas tarifas para no ser sancionados con penas administrativas y hasta corporales.
DESDE EL CAFÉ… Y ya que estamos en las cuentas públicas el auditor superior debería de aprender del Secretario de Hacienda que si le pone ganas y no solo es de escritorio, supervisa, analiza y actúa, vea amable lector…El secretario de Hacienda, Javier Jiménez Jiménez, informó que en el marco del Sistema Nacional de Coordinación Fiscal y para mejorar la participación del Impuesto Sobre la Renta (ISR), es muy importante el timbrado de nómina para la recuperación del incentivo, el cual ha generado en 3 años de gobierno, más de 5 millones de pesos por este concepto.
Señaló que, conforme al Convenio de Colaboración Administrativa en Materia Fiscal Federal, se liquidó la deuda del ISR retenido por sueldos, salarios, honorarios y arrendamientos del Instituto de Salud, el Colegio de Bachilleres de Chiapas, la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach) y la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach).
Javier Jiménez resaltó que esta secretaría, a través de la Coordinación General de Recursos, ha realizado un trabajo serio y exhaustivo para normar, vigilar y supervisar la correcta administración de los recursos humanos del Ejecutivo estatal, impulsando el mejoramiento de la calidad y profesionalización del servicio público.
Finalmente, el funcionario estatal dijo que, desde el inicio de esta administración, se impulsó un proceso de reorganización y reingeniería administrativa de las estructuras orgánicas de las dependencias y organismos públicos, reduciendo estructuras y unidades de puestos innecesarios, cuidando en todo momento no afectar la cobertura y calidad de los servicios a la ciudadanía,
con base a los principios de eficiencia, honradez y austeridad.
