Comentario Zeta
Carlos Z. Cadena
(Tras elección, corcholatas federales dudan de 5 encuestadoras que quedaron muy mal con su investigación electoral).
Desde un principio de esta 4T, la figura de la encuesta logró adquirir relevancia dentro de la plataforma política del país, sobre todo dentro del proceso electoral del 2021, donde aparecen por vez primera la “Feria de las Encuestas”, donde muchos candidatos a los gobiernos estatales que contendieron -15 gubernaturas- y hasta en las 500 diputaciones para diputados federales que se manejaron giro alrededor de la casas encuestadoras que las aventaban por delante perversamente para manipular la imagen de determinados aspirantes sobre todo aquellos que buscaban las gubernaturas. Fue en este año del 2021, donde empezó el sospechosísmo de las encuestas que curiosamente es una herramienta formal que viene pergeñado al interior de los estatutos y documentos básicos de MORENA.
Hoy se repite la historia, pero con mayor volumen de escándalo, porque se encuentra de por medio, la elección del próximo presidente de México, además de las nueve candidaturas que restan, -entre ellas Chiapas- y que van a la par con el proceso federal, para culminar las 32 gubernaturas que se otorgaron en esta denominada cuarta trasformación. Sin embargo la elección Presidencial y el destape anticipado de al menos cuatro corcholatas federales -Sheinbaum, Ebrard, Adán Augusto y Monreal- ha creado un desorden electoral en el país, por eso la celeridad que había por desaparecer el INE, sin embargo ahora el problema ya no es el INE mucho menos la oposición partidista, ahora los adversarios para elegir Presidente de México, son los mismos de MORENA con sus corcholatas federales, que han inventado encuestas con tal de mandar mensajes de que están en primer lugar, pero que son encuestas manipuladas y cuchareadas. Por lo pronto hay cuatro grupos fuertes diseminados por todo el país, al interior de MORENA que se disputan el privilegio de mandar en Palacio Nacional y que han utilizado la encuesta que ha dejado de tener certidumbre.
En Comentario Zeta, siempre advertimos que no creíamos en las encuestas, ni la nacionales mucho menos las estatales, porque no reflejaban los números que se daban a conocer, el corazón de muchos inflaba las encuestas y cuando el hígado sobresalía hacían diminuta la imagen adversaria de determinado aspirante al gobierno. Además de inflar números y reducir imágenes muchas de las encuestas no eran “creíbles”, porque aparte de dimensionar el triunfo electorero con números apabullantes, ponían a otros candidatos muy cerca del ganador que sencillamente no convencían, o sea ni para engañar servían, mucho menos para manipular los enviados del candidato o candidata determinado, no supieron realizarlas esta herramienta de operatividad política que lamentablemente ya se le perdió credibilidad y fe, y fueron los mismos morenos que actuaron irregular y anormalmente y son los propios culpables de que así sea. Y sino veamos lo último que sucedió en el Estado de México, según denuncias en la prensa nacional sobre las casas encuestadoras que ya dejaron de ser creíbles, fidedignas, veraces y claras. Veamos:
Bajo sospecha “casas encuestadoras” que dimensionaron el triunfo en el Estado de México.
“La contienda interna de Morena arranca con dudas en torno a la efectividad de media decena de encuestadoras, cuyos resultados fueron muy distantes de la realidad en la elección en el Estado de México, en la que algunas sobreestimaron hasta por 20 puntos la victoria de Delfina Gómez sobre Alejandra del Moral. Integrantes de los equipos de las llamadas corcholatas, consultados por MILENIO, admitieron que los resultados imprecisos de las empresas durante la elección en el Estado de México prendieron los focos rojos sobre la confiabilidad de los sondeos de cara a la encuesta que defina al candidato presidencial, por lo que este domingo se planteará, durante el Consejo Nacional, un perfil diferente a los de las empresas que erraron en los comicios mexiquenses.
Las cinco empresas que han perdido la confianza de los morenistas son: Enkoll, Parametría, Votia, Mendoza Blanco y Covarrubias.
Las dos últimas son las encuestadoras que Morena ha utilizado frecuentemente en sus procesos internos para definir a candidatos a las gubernaturas; los últimos fueron los del Estado de México y Coahuila. Sin embargo, los equipos de los aspirantes morenistas consideraron que para la elección del pasado 4 de junio en el Estado de México, estas empresas no dieron números acertados o cercanos a la realidad. Aunque todas siempre reportaron ventajas holgadas de la candidata de Morena, Delfina Gómez, los porcentajes de esas encuestas estuvieron muy lejos del resultado final, lo que pondría en riesgo la confiabilidad del ejercicio en la selección del candidato presidencial.
La utilización de las encuestas de estas empresas será un tema a discutirse el próximo domingo 11 de junio durante el Consejo Nacional de Morena, en donde se planteará que, a la luz de los “malos resultados” de las encuestadoras, no deberían participar en el proceso interno, revelaron los equipos de los morenistas. De hecho, dos de las cinco encuestadoras mencionadas por los equipos de los aspirantes, Mendoza Blanco y Votia, fueron señaladas por el Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) por difundir resultados falsos que daban una supuesta ventaja a Delfina Gómez.
El sábado 3 de junio, a un día de que se celebraran las elecciones en el Estado de México, el TEEM dio a conocer una sanción contra Morena por haber contratado a cinco casas encuestadoras que dieron una falsa ventaja a su candidata. Las empresas señaladas fueron Mendoza Blanco y Asociados; Votia Sistemas de Información; Electoralia, Datos Eficientes, Decisiones Inteligentes; Gobernarte y Demoscopia Digital, las cuales, según los magistrados, no tuvieron metodología para realizar los estudios de opinión, con lo cual se pretendió maquillar cifras.
Una diferencia dudosa
Los resultados electorales del pasado domingo 4 de junio en el Estado de México, en donde ganó la morenista Delfina Gómez, rompieron las previsiones que empresas encuestadoras habían arrojado en los días previos a la votación, con las que se esperaba que la diferencia frente a la priista Alejandra del Moral sería de dos dígitos.
Mientras el conteo rápido del Instituto Nacional Electoral (INE) difundido la noche del domingo dio una ventaja de apenas 9 puntos a la abanderada de Morena frente a Alejandra del Moral, candidata de la coalición Va por el Estado de México, conformada por PRI, PAN y PRD, hubo encuestadoras que pronosticaban una ventaja mucho mayor, de entre 17 y 24 puntos, en las últimas semanas de mayo.
En los resultados de la encuesta de Parametría, dados a conocer el 31 de mayo, la morenista Delfina Gómez ganaba con 17 puntos, al acumular 57 por ciento de preferencia frente a 40 de su rival aliancista Alejandra del Moral. También a finales de mayo, la encuestadora Enkoll le daba a Delfina Gómez una ventaja de 18 puntos, al sumar 59 por ciento de preferencia por encima del 41 por ciento que lograba Alejandra del Moral. Al final, de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) Gómez ganó a Del Moral por 8.36 puntos. Dixe.
