Epígrafe
Marco Briones
El próximo tres de abril se llevarán a cabo elecciones extraordinarias en el estado, con lo cual habrá de concluirse el proceso electoral para renovar las autoridades de los 124 municipios chiapanecos que inició en el 2020.
Aunque pareciera que las elecciones en estos seis municipios no tuvieran mayor relevancia política, ya que el listado nominal de estos municipios juntos solo representa el 3.8% del total de electores del estado, la realidad es otra, pues, se están disputando en el marco del proceso sucesorio estatal que ya ha iniciado.
Actualmente dos grandes grupos políticos se están disputa por el poder en el estado y por lo tanto la candidatura para suceder al Gobernador de Chiapas.
Por un lado, los Verdes de Manuel Velasco que ven en Eduardo Ramírez a su candidato natural y por el otro, los Morenos de la cúpula nacional que tienen en Zoe Robledo a su candidato respaldado nada más y nada menos por quien vive en Palacio Nacional.
No obstante, la historia nos dice que Verdes y Morenos se han aliado en los pasados procesos electorales obteniendo mayoría para el congreso local y federal. Entonces, la sucesión gubernamental representaría que uno de los dos grupos dimitiera frente a la imposición del candidato y eso es un escenario que no les gusta a los verdes.
Sin embargo, MAVECO sigue con su despliegue de estrategias, tal y como lo hizo en el ya mencionado pasado proceso electoral, donde propuso una coalición solo para las elecciones de diputados locales y no para las elecciones de ayuntamientos, bajo la lógica de que los votos de los partidos separados, al juntarlos en las coaliciones suman.
En el pasado proceso electoral para ayuntamientos Morena obtuvo el triunfo en 25 municipios y el Verde en 35; en las elecciones para diputados locales ambos partidos, coaligados además con PT, Chiapas Unido y Mover a Chiapas ganaron los 24 distritos, 11 para Morena y 7 para el Verde.
En este contexto, para el proceso local extraordinario los Verdes proponían una alianza con el PT, en clara referencia a la alianza que está construyendo Monreal en el Senado y, por supuesto donde su alfil en Chiapas sería Eduardo Ramírez; sin embargo, esta propuesta se tropezó con un Gobernador morenista que no permitiría que su partido en Chiapas siga siendo rehén de las estrategias de los senadores, por lo cual se presentó y se aprobó la semana pasada la coalición Morena-Verde.
En esta semana se llevarán a cabo los registros de los candidatos que participarán en la elección y la coalición Morena-Verde, donde presentarán sus seis candidatos, los cuales serán registrados como morenos, aunque provengan del Verde, así de ganar las seis elecciones, Morena tendrá 31 alcaldes contra los 35 del Verde.
En Frontera Comalapa se perfila Carlos Ramírez del Pvem, y dejaría fuera al morenista Rey David Gutiérrez, quien podría inscribirse por otro partido y dar la batalla; en Siltepec el petista Alfredo Bersain Roblero se perfila como el candidato de la coalición Morena-Verde, sin embargo las bases de ambos partidos lo pueden dejar solo, pues actualmente es quien manipula el Concejo Municipal y no lo ha hecho nada bien, por lo que este escenario pudiera favorecer al candidato del PRI Reynahu González; En Emiliano Zapata se perfila como candidata de esta coalición la ex Secretaria del Ayuntamiento Marein Alejandra Román, quien está armando su equipo con ex candidatos y ex presidentes municipales y por ello le quitaría la candidatura a la hija del Expresidente Municipal Amador Moreno, Alejandra Moreno; En Carranza la suerte está echada, seguramente los partidos no participarán o mandarán candidatos débiles para que el triunfo lo obtenga el preferido de palacio, José Luis Avendaño, en Honduras de la Sierra ya aventaja con amplio margen en las preferencias Ana Rosa Morfín y en Parral Karina Camacho.
Breves epígrafes. –
En el despacho presidencial hay dos temas primordiales a defender en los próximos meses: la reforma eléctrica y la reforma electoral.
Estos temas son de gran calado y han sido ubicados como los de mayor relevancia, ya que constituyen el legado político e ideológico del presidente: ambas reformas significan un golpe a la política neoliberal impulsada por los anteriores gobiernos. Mientras las grandes obras de infraestructura avanzan, AMLO pretende dejar una huella de su gobierno en el ámbito político y energético y eso es muy claro en el argot político.
Ahora bien, en torno a estas dos grandes reformas que se estarán moviendo los asuntos políticos: la revocación de mandato debe ser vista, como una muestra de la importancia que tiene el concepto de democracia participativa directa, en el pensamiento político de AMLO.
En este sentido no sería extraño que la nueva reforma electoral que proponga este gobierno, privilegie la democracia participativa sobre la representativa, lo que podría significar una reducción de diputados y senadores plurinominales.
En el mismo sentido, la reforma eléctrica será defendida con todo el arsenal político con que cuente la 4T, por ello el gobierno de AMLO mandará a sus mejores hombres y mujeres a la defensa de su propuesta, al mismo tiempo que, en el marco de la sucesión adelantada que está manejando este gobierno, se muestren en sus estados aquellos que pueden ser los candidatos a gobernar.
El pasado 29 de enero Rocío Nahle encabezó un acto multitudinario en el Puerto de Veracruz, donde es señalada como la candidata a suceder a Cuitláhuac. El día 17 de enero Claudia Sheinbaum participó en los Foros Abiertos del Congreso sobre la Reforma Eléctrica.
El domingo 27 de febrero Zoé Robledo, director del IMSS participó en un evento multitudinario en Chiapas.
AMLO mueve sus piezas a defender sus Reformas, jugada de ajedrez que muestra sin disimulos y de manera abierta a sus candidatos.
En pocas palabras, AMLO ya bajó sus cartas y los puso a trabajar, a ganarse su candidatura pues.
Recuerde, solo es mi opinión y nada es personal…
