A. Marroquín / Diario de Chiapas
Al menos un 10 por ciento del total de la población en Tuxtla Gutiérrez vive “desafiando” el peligro por habitar en zonas consideradas de alto riesgo.
Jorge Antonio Paz, docente e investigador de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, informó que el 14 por ciento de la población en Tuxtla Gutiérrez vive en zonas susceptibles a derrumbes y zonas de mayor riesgo.
Históricamente, puntualizó, ha sido la ladera sur de la capital donde se han comenzado a agotar los espacios viables para la construcción, por ello, el especialista en geomática, advirtió que la tendencia es la construcción vertical.
Por lo anterior, consideró que fue la falta de ordenamiento vial, construcción de conjuntos habitacionales con materiales poco viables para la zona y falta de estudios de factibilidad, lo que ocasionaron que miles de viviendas fueran declaradas como pérdida total.
“A nuestras autoridades los rebasa el crecimiento por invasiones, movimientos sociales y la presión de estos movimientos genera decisiones precipitadas, colonias como Loma del Oriente, junto a la Cueva del Jaguar que fue una colonia que hace 30 años se fundó y que a la larga fue regularizada”, comentó.
