• Los primeros cuatro cuerpos fueron velados por familiares y llevados a cementerios de Guatemala
José Cancino/ Diario de Chiapas
Cuatro de los 56 migrantes que fallecieron en el accidente de tráiler el pasado 9 de diciembre en los suburbios de Tuxtla Gutiérrez, fueron sepultados en su natal Guatemala por familiares y amigos cercanos.
Leonel Gómez Zepeda, uno de los primeros fallecidos que pudo ser enviado a su país, fue velado y sepultado este lunes en el panteón municipal de Malacatán, a 15 kilómetros de la frontera con Chiapas, en el departamento de San Marcos.
Su padre, Santos Gómez, señaló que su hijo salió de su país con el firme propósito de encontrar una mejor oportunidad de vida en Estados Unidos, pero apenas iniciado el camino perdió la vida.
“Se fue porque quería algo mejor, era un buen hijo, un buen padre, una persona de gran corazón y ahora le pido a Dios que me lo bendiga y que esté tranquilo descansando”, señaló entre llanto.
A Leonel le sobreviven sus cuatro hijas: Alexandra, de 17 años; Katherine, de 15; Sharon, de 13; y Yesenia, de 9 años, las cuatro reunidas ante el féretro de su padre que tuvo que pagar a traficantes de humanos para intentar llegar a la Unión Americana.
SALIÓ EL 6 DE DICIEMBRE
Leonel se fue de casa tres días antes del fatal desenlace que tuvo junto a otros 55 extranjeros. Se despidió de sus cuatro hijas el 6 de diciembre en el parque central de su natal Malacatán, a las que prometió llegaría a Estados Unidos y desde allá les enviaría dinero para su educación y subsistencia en este país centroamericano.
Pero el viaje fue efímero. Tardó 14 días en volver a casa, aunque ahora en un ataúd. Su arribo fue cerca de la una de la madrugada del pasado 18 de diciembre al Aeropuerto Internacional La Aurora, en Guatemala, para después ser trasladado vía terrestre por más de 278 kilómetros hasta su lugar de origen.
El hombre de 38 años tenía afición por el fútbol, a tal punto que fue jugador profesional en la división especial del Malacateco F.C., el equipo local que ahora juega en la primera división del fútbol guatemalteco.
Allí se hizo amigo de muchos, con quienes celebró el ascenso al máximo circuito del fútbol en su país.
“Era delantero, pegaba bien al balón y tenía empuje en el área contraria, se tuvo que ir del fútbol para buscar nuevas oportunidades, primero aquí en Guate y luego en ese viaje que le quitó la vida”, relató un oficial de Tránsito que también jugó al fútbol y ahora abandera el funeral de Leonel rumbo al cementerio.
FALTAN 52
Hasta el lunes, solo cuatro cuerpos habían podido ser repatriados a Guatemala, mientras que en los próximos días se prevé que más guatemaltecos sean enviados en un vuelo privado hacia ciudad de Guatemala y, en consecuencia, a sus lugares de origen.
Entre las víctimas mortales también hay personas provenientes de República Dominicana, así como de otros países de Centroamérica, pero aún es complicada la tarea de identificación de cuerpos para las autoridades mexicanas y de otros países.
El gobierno de Guatemala informó que se ha dado asistencia completa a las familias de los fallecidos, así como cobertura de gastos para trasladarlos desde la capital del país hasta su sitio de origen.
