Edgar Castillo / Pijijiapan
Este jueves, con horario de las 03:30 horas, la caravana migrante se retira del parque central Miguel Hidalgo y reanuda su viaje rumbo al Norte del país.
Actualmente se encuentran sobre la carretera federal número 200, continúan su avance hacia el municipio de Tonalá.
La afluencia estimada es de aproximadamente 2500 personas de diferentes nacionalidades entre hombres, mujeres y menores de edad.
Se han realizado 8 atenciones de primeros auxilios a migrantes (embarazadas, lesionados) que lo han requerido. Todo se reporta sin novedad en su trayecto.
Sin respuesta
Los migrantes se encuentran cansados, con hambre y sin recursos, a decir del coordinador del éxodo, Luis García Villagrán; además, hasta el momento no hay respuesta a su petición de ayuda a las autoridades federales.
“Hasta el momento no nos han confirmado la ayuda, pero seguimos esperando, ya que los migrantes vienen cansados y ya no tienen recursos para sus alimentos. Ellos van a descansar en el Ejido Gustavo López y continuarán su trayecto mañana”, explicó.
Detalló que hablaron con la Guardia Nacional para que los siga acompañando, debido a los conflictos entre bandas criminales que hay en la región, por ello, se sugirió descansar en este Ejido donde se les pueda vigilar.
En su petición, los integrantes del también llamado viacrucis migrante denunciaron que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y el Instituto Nacional de Migración (INM), les da citas hasta el mes de julio, y a la mayoría de personas ni siquiera les han llamado.
“Esto provoca una aglomeración en esta ciudad, que como migrantes sin dinero, no podemos aguantar; además de que en Tapachula y sus poblados circunvecinos no existen las condiciones para subsistir dignamente; pues decidimos forzados por nuestra actual situación y la apatía de la autoridad migratoria, caminar en grupo”, destaca la petición de los migrantes.
Por ello, ante su condición de vulnerabilidad piden la entrega de Formas Migratorias Múltiples, a fin de continuar su viaje por el país.Sin embargo, su petición no ha tenido respuesta hasta la fecha.
Piden apoyo
A pesar de que el Tren Suburbano es un transporte ampliamente vigilado, algunos migrantes se las ingenian para subirse a los vagones y solicitar apoyo monetario.
Este jueves un grupo de extranjeros irregulares de Honduras abordó la unidad y solicitó dinero a los usuarios, quienes sorprendidos vieron a los migrantes, debido a que en este transporte no se permite el comercio informal o a gente solicitando apoyo.
Los hondureños avanzaron por todo el convoy sin ser descubiertos y bajaron en la siguiente estación.
