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La comunidad que es entrada y salida del país, está en el abandono por parte de las autoridades municipales de Tuxtla Chico.

José Cancino / Tuxtla Chico
La puerta de entrada a México desde Centroamérica está convertida en un basurero total, sin que autoridades del municipio de Tuxtla Chico atiendan esta problemática.
La comunidad de Talismán, fronteriza con El Carmen, Guatemala, se mantiene en completo deterioro y con sus pocas calles repletas de basura por doquier, sin que el servicio de recolección atienda esta situación y se genere día a día más contaminación y mala imagen en los primeros metros de territorio mexicano.
En los camellones de la avenida principal que conduce hacia la garita lado aduanal y migratoria, como los de basura y residuos adornan esta división, mientras que perros callejeros dispersan toda la inmundicia cerca de negocios, cocinas económicas y demás comercios.
Aunado a esto, por las noches el lugar no sólo luce contaminado, también inseguro debido a la falta de alumbrado público que ha sido una exigencia de los lugareños.
Hasta el momento, la administración del presidente Julio Gamboa no ha atendido la problemática, mientras que los pobladores de esta comunidad exigen servicios básicos como la recolección de basura, alumbrado público, incluso que se coloque la bandera mexicana en la asta, ya que lleva mucho tiempo sin darle una imagen digna a esta comunidad que es entrada y salida del país.
En ocasiones anteriores, vecinos de este puerto fronterizo han denunciado la quema de desperdicios, sin que autoridad alguna actúe y sancione al generar más contaminación de la que ya existe.
Turistas nacionales y extranjeros han criticado severamente el actuar de las autoridades, indiferentes ante esta problemática que aqueja a cientos de personas a diario.
Los afectados apuntaron que la basura pasa varios días antes de que recolectores se dignen a brindar el servicio en esta pequeña población, aledaña al río Suchiate, que también luce contaminado en toda esta área cercana a los cinco kilómetros.

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