Sigue siendo uno de los aeropuertos más caros en el país, aunado a que los locales comerciales no son ocupados y los precios de productos están ‘por las nubes’
José Cancino / Tapachula
Locales vacíos, baños sin agua y ni una sola banca para el descanso de familiares que llegan a despedir o recibir viajeros, son apenas algunas de las tantas anomalías que presenta el Aeropuerto Internacional de Tapachula (AIT), que fue anunciado como una de las terminales más vanguardistas y sofisticadas del país.
Usuarios de esta terminal en la frontera sur, señalaron que pese a haber sido renovada por presión del gobierno federal, el aeropuerto de Tapachula sigue siendo una de las terminales más caras del país, donde una soda alcanza los 65 pesos y una cerveza rebasa los 90 pesos, aunque al principio Aeropuertos del Sureste (Asur) prometió precios estables para los usuarios.
La terminal de Tapachula no tiene comercios ni establecimientos antes de ingresar a la sala de abordaje, pues de los siete locales diseñados para tiendas o empresas, sólo tres están ocupados, dos correspondientes a la renta de vehículos y uno más a productos básicos a cargo de una tienda, que desde la estación anterior operaba con los mismos precios altos.
La concesionaria Aeropuertos del Sureste (Asur) publicó en diciembre de 2021 el proyecto de remodelación para el Aeropuerto Internacional de Tapachula, en el cual se inyectaría una millonaria inversión para la restructuración de este inmueble que por muchos años permaneció sin cambios.
La suma de este proyecto rebasó los 89 millones de pesos, capitalizados por la Asur, que fue presionada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, al señalar que, si no se modernizaba esta terminal, fuera entregada la concesión al gobierno federal.
A pesar de la renovación estructural que a muchos ha gustado, dicha terminal aeroportuaria sigue padeciendo las mismas carencias que tuvo la antigua base de aterrizaje y despegue de aviones comerciales.
Tapachula ha estado en el top 5 nacional de aeropuertos con mayor flujo de pasajeros, aún sigue teniendo precios y costos altísimos para los chiapanecos.
