Familiares, amigos y compañeros de trabajo de Lucrecia Salva Fuentes marcharon para exigir justicia; por la tarde noche, la FGE emitió un comunicado donde detuvo a 3 implicados.
Valeria Córdova / Tapachula
Por segunda ocasión, familiares, amigos y compañeros de trabajo de Lucrecia Salva Fuentes, una enfermera asesinada el pasado 11 de marzo, marcharon por las calles de Tapachula para exigir justicia.
Después de una semana sin obtener respuestas, partieron del Parque Bicentenario hacia la Fiscalía de Distrito Fronterizo Costa, donde exigieron nuevamente a las autoridades que no se permita que su muerte quede impune.
“¿Qué pedimos por Lucrecia? ¡Justicia! A todas las autoridades correspondientes les solicitamos que se esclarezca este hecho y que se pague, que se pague como debe de ser”, se escuchaba dentro de la fiscalía.
La comitiva integrada por familiares de la víctima y personal médico del Hospital General de Tapachula, fue recibida por el fiscal especializado en feminicidios y delitos contra la mujer, Claudio Zenteno Zenteno, quien informó que existen avances en la investigación.
“Hay avances, pero no nos pueden decir bien porque vamos a entorpecer el proceso, pero sí están trabajando. Hay que darles la oportunidad de que den resultados”, señaló Berenice Rueda, doctora del Hospital General.
Al cierre de la edición, la Fiscalía General dio a conocer que se detuvieron a tres personas como presuntos responsables de la muerte de lucrecia.
