Gabriela Reyes/Diario de Chiapas
Con una recepción llena de magia, Diana y Humberto vivieron la boda de sus sueños. Rodeados de los seres que más amaban, disfrutaron de una velada perfectamente planeada por las mejores manos, donde cada detalle fuera perfecto y único, tanto para ellos como para sus familiares y amigos. La ceremonia, celebrada bajo un cielo radiante, se iluminó con un despliegue de fuegos artificiales, mientras ellos, emocionados, sellaban su amor con un sincero “sí, acepto”. La velada continuó con un festín de exquisitos platillos, acompañados de música que envolvía a todos en un ambiente de alegría y celebración, haciendo de esa noche un recuerdo inolvidable.























