M de R/Diario de Chiapas
En una conferencia de prensa, el Fiscal General del Estado, Jorge Luis Llaven Abarca, anunció avances importantes en la investigación sobre delitos de pornografía infantil cometidos dentro del Centro Estatal de Reinserción Social de Sentenciados No. 14 “El Amate”, en Chiapas.
El caso salió a la luz tras el asesinato de Yudiel Flores, interno del penal, lo que desencadenó una serie de diligencias que revelaron una red de corrupción y abuso al interior del centro penitenciario.
Cuatro custodios detenidos por pornografía infantil
El fiscal Llaven informó que cuatro custodios fueron detenidos por su presunta participación en delitos relacionados con pornografía infantil y ejercicio ilegal del servicio público. Los detenidos fueron identificados como Luis Miguel “N”, José Avelino “N”, Miguel Ángel “N” y Óscar Antonio “N”, todos mandos operativos adscritos a la Secretaría de Seguridad del Pueblo.
“No habrá impunidad para ningún servidor público que traicione la confianza ciudadana o se aparte de sus responsabilidades legales. Actuaremos con firmeza ante cualquier hecho delictivo”, afirmó Llaven.
Recompensa por exdirector de «El Amate»
Como parte de las acciones para esclarecer los hechos, la Fiscalía emitió un Acuerdo de Recompensa de 500 mil pesos para quien proporcione información que conduzca al paradero de Pascual “N”, exdirector de “El Amate”, actualmente prófugo y presuntamente implicado en los delitos investigados.
Capturan a Christian “N”, presunta implicada en red de abuso infantil
En colaboración con autoridades de Oaxaca, elementos de la Fiscalía lograron ubicar y detener en el municipio de Matías Romero a Christian “N”, quien frecuentaba a Yudiel Flores dentro del penal y facilitaba el acceso a menores de edad, haciéndose pasar por madre de los mismos.
La detenida fue trasladada a Chiapas y actualmente se encuentra recluida en «El Amate», como presunta responsable de pornografía infantil.
Homicidio de Yudiel Flores fue por venganza
En relación con el asesinato de Yudiel Flores, las investigaciones periciales revelaron que el móvil fue una venganza por parte de dos internos: Francisco “N” y Marco Antonio “N”, quienes compartían celda con la víctima en el módulo 4. Ambos serán imputados formalmente por el delito de homicidio.





