- Varias personas se dieron cita para pedir un alto a la ola de violencia, y justicia para los agredidos
Janet Hernández / Corresponsal Diario de Chiapas
San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.- Habitantes, familiares y colectivos salieron a marchar a las calles en San Cristóbal de Las Casas, en repudio a la violencia que sufren a diario los ciudadanos, por lo que llamaron a la paz ante la ola de violencia que se vive en esta ciudad turística y México.
Lo anterior se debe al atentado que sufrió Darinel Ballinas, activista cultural, reconocido por la comunidad, el pasado 6 de octubre, muy cerca de su domicilio en el barrio de Tlaxcala, considerado punto rojo por las autoridades municipales y estatales.
Los manifestantes caminaron al ritmo del tambor y al llamado de la caracola, portaron pancartas y mantas al llamado de la paz y justicia por la violencia y la corrupción que se vive en México.
Algunas leyendas de las pancartas decían: “Movilizando-nos por la paz “, “Paz”, “Ofrece paz y recibe paz”, “Una vida digna sin violencia”, “Paz es justicia”, “Paz es Humanidad”.
Los participantes manifestaron que la movilización fue a favor de los que no han tenido voz, o han sufrido una agresión brutal como la de Darinel, “hoy caminamos por todos, únete a la Paz”.
La manifestación terminó en el parque central con un mitin político cultural, donde jóvenes recolectaron ayuda económica y rifaron una obra de arte en favor de Darinel, quien será intervenido quirúrgicamente la próxima semana.
Durante el recorrido corearon «justicia para Darinel», «justicia para los agredidos», «Paz en San Cristóbal», «justicia para todos», «seguridad para los ciudadanos de Chiapas».
Los inconformes exigieron nuevas estrategias de seguridad para el municipio de San Cristóbal y de Chiapas, pues la violencia cada día va en aumento, «lo que le sucedió a Darinel les ha pasado a decenas de ciudadanos y turistas que visitan esta ciudad’.
Humberto, uno de los colonos de Tlaxcala, aseguró que su zona es la más peligrosa, pues a partir de las 5:00 de la mañana comienzan las agresiones y tiroteos, «nadie de los vecinos sale ante el temor de ser agredido, nadie se da cuenta de lo que pasa ni sale ayudar, debemos estar más unidos como gente y como pueblo».
