- Este 8 de febrero, la Iglesia realiza una Jornada Mundial de Oración y Reflexión sobre este fenómeno
Marco Alvarado/ Diario de Chiapas
La trata de personas es la expresión moderna de la esclavitud, alimentada por la explotación sexual, trabajos forzados y hasta el tráfico de órganos; urge combatirla porque es una forma destructiva que no respeta a los niños, a las mujeres ni a los más débiles entre nosotros, alertó el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez Castilla.
Al recordar que este 8 de febrero la Iglesia realiza una Jornada Mundial de Oración y Reflexión sobre este fenómeno, que destruye la vida de millones de personas cada año, el clérigo pidió una participación activa de la sociedad para terminar con estas redes.
Este domingo, al término de la homilía en la Catedral de San Marcos, informó que para este 2021 el lema de la jornada mundial es “Economía sin trata de personas”, porque este es un fenómeno complejo que ocurre a través del abuso en diversas expresiones, como el trabajo forzado de menores, ancianos y gente que proviene de familias empobrecidas “a ellos se les engancha para explotarlos, y no solo ocurre en otros países, aquí lo vemos a diario en nuestras calles, con niños y mujeres pasando penurias a diario”.
Recordó también que la Iglesia católica cuenta con una red internacional de religiosas llamada “Talitha Kum” presente en 92 países, que tiene como finalidad realizar acciones para eliminar todas las formas de trata, el rescate, acompañamiento y sanación de las víctimas.
En el caso de Chiapas, desde hace un par de años, a través de la Pastoral para Migrantes, trabajan en iniciativas que hagan visible el problema, que generen conciencia entre los fieles sobre la magnitud que tiene, y en acciones de alerta para los jóvenes, sobre todo las mujeres, de tal forma que no caigan en las redes de personas sin escrúpulos, que ahora emplean las redes sociales para prometer supuestas mejores vidas, mejores trabajos y más dinero, cuando en realidad solo es la puerta a un sufrimiento inimaginable, destacó.
