Editorial
Qué importante y trascendente que el próximo secretario de Salud en Chiapas, Dr. Omar Gómez Cruz, tenga en cuenta que los hospitales del Estado tienen que “recuperar esa sensibilidad en los pasillos de los diversos hospitales y así ofrecer un nuevo modelo de salud hacia la población”.
Pareciera que es una declaración menor esto que dijo ante esta casa editorial el joven galeno que tendrá una gran responsabilidad al frente de una de las áreas más fundamentales, y diríamos, la principal, en su corta, pero ya experimentada trayectoria en el sector.
Atender y resolver la precaria situación que se vive en los hospitales del sector público no es una situación menor, sobre todo, porque nos han engañado con el cuento de que el servicio que se ofrece en México es de primera, “mejor al que se ofrece en Dinamarca”, dijo en una decena de ocasiones el ex mandatario que hoy goza de toda la atención del Estado, para cuidad de su salud y de su seguridad: Andrés Manuel López Obrador.
El que Gómez Cruz haya reconocido que la situación es precaria, echa por la borda ese discurso triunfalista que siempre se le vendió al pueblo mexicano, y del que no ha gozado el habitante de Chiapas, principalmente el de bajos recursos, los que menos tienen.
Diario Media Group en sus diversas plataformas digitales y en medio impreso, ha dado cuenta de los escenarios que se viven en las clínicas rurales dependientes del Estado o en los mismos nosocomios de alta especialidad que brindan sus servicios en ciudades importantes como Tapachula, San Cristóbal, Palenque, Ocosingo y Tuxtla Gutiérrez, por citar ejemplos a la vista y de los cuales se tienen historias desgarradoras.
Muchas de éstas, describen el horror de los pacientes que no alcanzan a llegar a una cama de un hospital, dando a luz a su producto en el estacionamiento o a unos metros de entrar a la puerta del consultorio.
Palenque, Ocosingo y Ocozocoautla son fieles testigos de lo que hablamos. Por eso, reiteramos, tiene la mayor de las importancias el que el próximo secretario de Salud se fije la meta de erradicar en la medida de lo posible este lastre que se padece.
Sin embargo, esto no se soluciona con buenas intenciones y eso lo sabe él y el propio gobernador electo, Eduardo Ramírez Aguilar. Conocedores a fondo de la problemática del sector en la entidad, el rezago se resuelve con la inyección de recursos y con vigilar que quienes se encarguen de aterrizar toda esta plataforma de ayuda al más desprotegido, no esté corrompida, que no se insulte a la población con actos de corrupción en el manejo de los dineros que se destinen para combatir estos flagelos.
En el fondo del problema, tanto el doctor Gómez Cruz como el hombre que tomará posesión justo dentro de seis días, tienen la ventaja de que esa fue una de las promesas que hizo la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo durante sus recorridos de campaña por la entidad.
Incluso a nivel nacional se tiene el episodio de que, en un par de ocasiones, cuando le consultó a la población de dos municipios de Chiapas sobre cómo estaba el suministro de medicamentos y la atención en los servicios de salud, la respuesta fue unánime de que no había tales condiciones.
Esta situación palpable hizo reflexionar a la hoy presidenta para comprometerse a revertir los rezagos, por ello decimos que el próximo titular de Salud, con la gestión del gobernador Ramírez Aguilar, tienen la oportunidad histórica de consagrarse con los chiapanecos, si logran catapultar el servicio público en salud.
El mismo hospital Gilberto Gómez Maza, el que ha sido objeto de una sacudida por parte del gobierno que se va, en el sentido de haberlos dotado de equipo tecnológico de punta, continúa teniendo muchos conflictos de saturación para brindar un servicio completo y de calidad pues sigue habiendo el problema de la falta de medicamentos que el familiar tiene que comprar en la farmacia de la esquina.
Por ello la esperanza de un nuevo sistema de impartir atención a la salud, como lo dijo el doctor Omar, de que la prioridad se basa en un proyecto muy humanista y de mucha medicina preventiva, es una propuesta que ojalá aterrice.
En verdad que deseamos toda la suerte del mundo al nuevo equipo de trabajo que acompañará al doctor Gómez Cruz. Chiapas merece tener no un servicio como el de Dinamarca, porque estamos a años luz de ello, pero de que se puede acortar distancia con trabajo y menos discursos demagogos como en el pasado, claro que se puede.