Vigilar que alcaldes no hagan trampas en los programas Bienestar
Lo menos que podemos hacer en esta ocasión es destacar la labor que realiza en todo el territorio chiapaneco el delegado de Programas para el Bienestar en Chiapas, José Antonio Aguilar Castillejos, quien de forma personal ha estado realizando recorridos para supervisar los procedimientos administrativos y viabilidad de los pagos de las Pensiones Bienestar.
En Chiapas son casi dos millones de beneficiarios de los diversos programas que aplica el gobierno federal. Sin duda que por la gran cantidad de apoyos deben presentarse algunas irregularidades y es ahí donde la labor del funcionario ha permitido que se atiendan las posibles omisiones o errores sin dolo, y por qué no decirlo, solucionar donde algunos personajes se estén pasando de listos contra los ciudadanos que menos tienen.
Es de destacar, por ejemplo, el asistencialismo que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador realiza en favor de las personas con discapacidad permanente y que, por cierto, su apoyo durará toda su vida.
Pero no sólo la administración federal es portada de recursos, también la gestión sexenal del gobierno de Rutilio Escandón Cadenas tiene mucho que ver en ello y en ese sentido no hay que dejar de reconocerlo, ya que aporta la mitad de los recursos para que todas las personas con discapacidad en Chiapas puedan recibirla”.
Bajo estas circunstancias, Aguilar Castillejos tiene la enorme responsabilidad de que el manejo de estos recursos se realice con transparencia, que se dé cobertura a todas las personas que tengan esa condición y, por lo tanto, que nadie se excluya de los beneficios.
No es poca cosa destinar y vigilar más de más de 30 mil millones de pesos invertidos en Chiapas en los programas sociales, aunque habría que advertirle al funcionario federal que debe tener mucho cuidado con los alcaldes, pues a través de los ayuntamientos se facilitan los operativos de pagos.
Y decimos que debe blindarse porque los presidentes municipales, lo tenemos comprobado, se especializan en hacer transas, en engañar a las personas de mayoría de edad, de pagarles la mitad de lo que realmente les corresponde y aunque así lo señale y arroje los sistemas computacionales de la Secretaría de Bienestar, saben cómo engatusar a la gente.
Seguramente Aguilar Castillejos tendrá el cuidado suficiente y estar confiado de que no puede manipularse el recurso que ya viene etiquetado y personalizado, pero de que hay alcaldes que “huelen” la forma de estafar, los hay.
Fuera de ello, no se puede dejar de señalar que la vida de miles de chiapanecos y chiapanecos, desde niños hasta la edad adulta, ha mejorado considerablemente para tener efectivo que disponer ante las necesidades propias de la familia.
En la política de entrega de apoyos sociales establecidos por el presidente Andrés Manuel, debe prevalecer, como lo dijo Aguilar Castillejos, la garantía de los derechos sociales de los chiapanecos. Sin duda que ello es una prioridad que prevalecerá en este gobierno de la Cuarta Transformación, y que será fundamental que se conserve para el siguiente gobierno, si es que ratifica el triunfo a través de Morena.
La oposición y los expertos han hecho hincapié, sin embargo, que lo que han llamado derroche de recursos públicos para los programas sociales debe rediseñarse, pues lo que ocupan como becas las familias lo ocupan para ir al médico o comprar medicinas, servicios que antes se tenían con puntualidad en los hospitales.
Mientras sean peras o manzanas, por ahora no queda más que continuar brindando los apoyos que han convenido los gobiernos federal y estatal, y vigilar que éstos aterricen sin contratiempos y sin trampas.
Por lo pronto, el delegado de Bienestar vigila que los programas para los adultos mayores, relacionados con las pensiones referidas al bimestre mayo-junio 2023., se paguen durante este mes.
