Carlos Rosales / Diario de Chiapas
A unos días de celebrarse el Día de Muertos en Tuxtla Gutiérrez, los Panteones Municipales ya se encuentran casi listos para recibir a miles de visitantes y solamente se han afinado detalles.
Horacio Gómez González, secretario de servicios municipales del Ayuntamiento capitalino, comentó que desde hace dos semanas, se ha realizado la limpieza dentro de los camposantos, se ha pintado el lado perimetral y se han podado los árboles.
“Todas las secretarías como Protección Civil, Desarrollo Social, entre otras nos han ayudado en todas estas tareas que son primordiales, para que los panteones sean un lugar seguro para aquellas personas que visitan a sus fieles difuntos”, acotó.
Recalcó que en los Días 1 y 2 de noviembre, esperan una fuerte afluencia de visitantes cerca de 150 mil personas en los dos panteones municipales, ya que ha sido una celebración que ha perdurado a lo largo de muchos años en la ciudad capitalina.
“El operativo arrancará el día 1 de noviembre a las 7 de la mañana y tendremos cerca de 50 elementos de seguridad pública en los dos camposantos; además, habrá personal de Protección Civil y otras dependencias”, apuntó.
Dijo que en estos próximos días, se van a afinar algunos detalles como es la abatización de los floreros de las tumbas y dos días antes del Día de Muertos, se va a fumigar a ambos panteones municipales para reducir los mosquitos y así evitar la propagación de enfermedades por vectores.
Asimismo, dijo que se acordonaron algunas tumbas que se encontraban abandonadas, ya que pueden representar un peligro para la ciudadanía. En el Panteón Viejo Municipal se detectaron 22 tumbas abandonadas y en el Panteón San Marcos, fueron cerca de 72.
También, habrá ambulancias afuera de los panteones en dado caso ocurriera algún accidente y así poder actuar de inmediato para salvaguardar la integridad de la ciudadanía.
El secretario de servicios municipales, Horacio Gómez González, hizo una invitación a los visitantes a que tiren su basura en los contenedores y eviten dejarlo tirado en los pasillos, ya que podría ser una primera causante de proliferación de zancudos.
