Carlos Rosales / Ainer González
Marco Alvarado / José Salazar / Francisco Mendoza
Edición: Francisco Mendoza
Diseño: Luis Méndez / Diario de Chiapas
El 15 de junio de 2006 el ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez firmó el Contrato de Prestación de Servicios por tiempo establecido a 20 años para la operación del Sistema Integral de Manejo y Disposición de Residuos Sólidos Urbanos y Residuos de Manejo Especial con la empresa Proactiva propiedad en partes iguales de la constructora española FCC y la empresa francesa de servicios Veolia Environnement.
El contrato aún vigente incluye (hasta 2026): barrido, recolección, transporte, estación de transferencia, disposición final, mantenimiento de pos clausura del basurero anterior y adquisición de terrenos relativos a la concesión del servicio público municipal de limpia del ayuntamiento tuxtleco.
Según el Portal Business Insight in Latin America la compañía Proactiva Medio Ambiente (hoy Veolia Tuxtla), se adjudicó un contrato de 90.8 mn de euros (alrededor de 116 millones de dólares) para construir y operar un relleno en Tuxtla Gutiérrez.
Desde Juan Sabines Guerrero 2004 – 2006, pasando por María del Rosario Pariente Gavito 2006 – 2007, Jaime Valls Esponda 2007 – 2010, seguida de Flor de María Coello Trejo 2010; además de Seth Yassir Vázquez Hernández 2010 – 2012, Felipe de Jesús Granda Pastrana 2012, seguido de Samuel Toledo Córdova Toledo 2012 – 2015, Luis Fernando Castellanos Cal y Mayor 2015 – 2018 y hasta Carlos Morales Vázquez 2018 -2021, han visto pasar las laceraciones que la empresa ha provocado al medio ambiente sin hacer nada por declinar el contrato con la empresa francesa.
Cada uno de ellos, hasta el propio Carlos Morales Vázquez, dijo en campaña política para acceder a la presidencia municipal, que se encargaría de sacar a la empresa de Tuxtla Gutiérrez, sin embargo, esto no solo no fue posible.
Plan de pagos
Según el Anexo A de plan de pagos elaborado por el ayuntamiento municipal de Tuxtla Gutiérrez, del convenio modificatorio del Contrato de Prestación de Servicios (CPS), formalizado el mes de diciembre de 2018; cita que las partes (Veolia Bajío y el Ayuntamiento tuxtleco) están de acuerdo de pagos favoreciendo a la empresa francesa.
Esto a fin de disminuir el saldo insoluto (la cantidad que resta una vez que se descuenta cada uno de los pagos), generado a partir del mes de octubre de 2014, desde la administración de Samuel Toledo Córdova Toledo.
Según el monto manejado por la empresa Veolia son 336 millones 381 mil 349.76 pesos los que el ayuntamiento municipal debe pagar; 314 millones 946 mil 776.65 pesos por concepto de saldo facturado al 31 de agosto de 2018 y 21 millones 434 mil 573.11 pesos por obra no facturada.
Sin embargo, las partes llegaron a un acuerdo sobre un monto de quita que se establece de la siguiente manera: Importe objetado por el Ayuntamiento: donde Veolia Bajío entregará al Ayuntamiento una nota de crédito por el importe objetado prorrateado (distribución proporcional de algo en numerosas partes), por 36 meses a medida que se va dando el cumplimiento de los pagos por la cantidad de 58 millones 813 mil 786.13 pesos.
Otra de las quitas en obra no facturada, el monto es de 21 millones 424 mil 573.11 pesos; la quita adicional de 18 millones 723 mil 741.03 pesos y la reducción de inversiones que corresponde a 23 millones 238 mil pesos a diciembre de 2018 y 17 millones 242 mil pesos de los próximos años hasta concluir la administración de Carlos Morales Vázquez, siendo un total de 40 millones 480 mil pesos.
El total de los cuatro conceptos de quita que buscó el ayuntamiento para la reducción de la deuda y el pago de los tres años de la administración actual es de 139 millones 452 mil 100.27 pesos.
Reestructura del convenio
Carlos Morales Vázquez, durante su gestión como presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, impulsó una reestructuración del contrato con la empresa Proactiva-Veolia, a pesar de los señalamientos sobre su mal servicio y su supuesta quiebra. Como parte de este proceso, la administración municipal destinó 15 millones de pesos para un programa piloto de contenerización, cuya transparencia ha sido cuestionada.
Ambientalistas denunciaron que la adquisición de los contenedores se realizó de manera directa y sospechan que podrían ser los mismos que Morales Vázquez no entregó ni transparentó cuando fue secretario de Medio Ambiente e Historia Natural de Chiapas (Semahn).
La entonces regidora Adriana Guillén, presidenta de la Comisión de Residuos Sólidos, también señaló irregularidades en la operación y criticó que, en lugar de corregir las deficiencias en la recolección de basura, Morales Vázquez optara por restructurar el contrato con Proactiva-Veolia, comprometiendo recursos millonarios del Ayuntamiento.
En enero de 2020, el municipio pagó 14 millones de pesos a la empresa, además de un gasto mensual de 4 millones de pesos por la recolección, sumando 17.4 millones de pesos. A esto se agregó la construcción de una nueva celda en el relleno sanitario por 35 millones de pesos y un adeudo de 19.8 millones que debía liquidarse posteriormente.
El convenio de reestructuración estipulaba que la empresa invertiría hasta 15 millones de pesos en un plazo no mayor a 12 meses, pero la falta de transparencia generó dudas sobre el destino de los recursos.
La Comisión de Residuos Sólidos del Ayuntamiento solicitó al gerente de Proactiva-Veolia, Alejandro Castañón, un informe detallado sobre el uso de los recursos y la adquisición de 2,600 contenedores, pero nunca se entregó información clara al respecto.
Según la empresa, se destinaron 11 millones de pesos a la compra de los contenedores, 2 millones en postes sujetadores y otros 2 millones en campañas de difusión y brigadas informativas, sin que se haya presentado documentación que lo respalde.
La falta de claridad en este proyecto ha generado sospechas sobre quién realmente se benefició de la reestructuración de Proactiva-Veolia, mientras que los problemas en la recolección de basura continúan afectando a los habitantes de Tuxtla Gutiérrez.
Contenerización
El proyecto de contenerización en Tuxtla Gutiérrez, para tener un mejor manejo de los residuos sólidos, fue polémico desde el inicio, ya que todo el proceso fue asignado directamente a la empresa Veolia.
Fue así que, en junio de 2020, cuando la atención estaba en la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19, se supo que la administración de Carlos Morales prefirió pagar de más antes que abrir un concurso público para obtener mejores ofertas.
Con tal de cerrar el trato, el gobierno de Morales pagó 28 millones siete mil 264 pesos a la empresa Veolia Residuos Tuxtla, S. A. de C.V.
En lugar de hacer una licitación como lo exige la Ley de Adquisiciones de Bienes Muebles y Contratación de Servicios para el estado de Chiapas, el gobierno de Carlos Morales habría elegido otras empresas.
Incluso una cotización al azar, encontró a una empresa que ofrecía los contenedores a seis mil ocho pesos, con IVA incluido, y cuyo costo total no era superior a los 23 millones de pesos. Mientras que los adquiridos a Veolia costaron, por unidad, siete mil 303 pesos.
Sin embargo, el ayuntamiento se aferró a defender esta compra, alegando supuestos beneficios incluidos en la compra, que hoy evidentemente resultaron ser promesas de relumbrón, a tal punto que la misma empresa dejó que estos contenedores se degradaran y que hoy muchos están en mal estado, y esto fue posible porque el gobierno de la ciudad aceptó un trato con una garantía por vicios ocultos en la fabricación, de sólo un año.
La situación actual de estos contenedores es muy distinta a la que se prometió a finales de 2019, cuando se anunció una primera etapa con la instalación de tres mil 834 contenedores.
Equipos que, en muchos casos, ya están quebrados o carecen de tapas, lo que incumple con su objetivo de disminuir el riesgo de propagación de enfermedades infecciosas al encapsular la basura y con ello, evitar la dispersión de la misma por la lluvia, el aire, los animales callejeros e incluso las plagas de roedores.
Daños colaterales
El ex alcalde de Tuxtla Gutiérrez, Carlos Morales Vázquez, está nuevamente en la mira de la Auditoría Superior del Estado (ASE) y de la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado, tras autorizar en 2019 y 2020 la compra directa de 3 mil 834 contenedores por más de 28 millones de pesos, a la empresa Veolia/Proactiva.
El proyecto de “contenerización” del ayuntamiento capitalino con la empresa Veolia, es un tema que el Poder Legislativo local no ha quitado de la mira y continúa analizando a detalle, la presunta violación a Ley de Adquisiciones, Arrendamiento de Bienes Muebles y Contratación de Servicios para el Estado de Chiapas.
Lo anterior se presenta, luego de que la administración 2018-201 de Morales Vázquez, realizará la adquisición directa de 3 mil 834 contenedores por un precio de 28 millones 7 mil 293 pesos y 30 centavos.
La “nueva” flotilla de camiones recolectores y de contenedores que adquirió el ayuntamiento de Tuxtla a la empresa Veolia-Proactiva, deben ser indagados por la autoridad competente, ya que resulta una “simulación” más del contrato millonario que renovó el ayuntamiento tuxtleco con la compañía recogedora de basura, sostuvo el ambientalista chiapaneco, Héctor Montesinos Cano.
En entrevista para Diario Media Group, señaló como lamentable la simulación que emprendió Alejandro Castañón Aguilar, gerente general de Veolia-Tuxtla; y el ex alcalde de Tuxtla, Carlos Morales, para beneficiarse mutuamente.
Montesinos Cano indicó que la problemática de contaminación en la ciudad, como en el predio San Martín Mujular continúa, así como los problemas a la salud que de ahí se derivan.
“Casualmente cuando llega como alcalde, donde el mismo referenció que le correspondía al ayuntamiento pues defendió a Proactiva a capa y espada… y a eso súmale al fraude que se hizo por la misma Proactiva y Carlos Morales, con los contenedores, porque los contenedores le pertenecen a una filial de Proactiva-Veolia”, dijo.
Por ello, comentó que tanto la Profepa, Semarnat y otras autoridades federales se han mantenido reservados del tema, ya que a su parecer están a complacencia de lo que diga el alcalde.
Actualidad
En las últimas semanas, la recolección de basura ha sido un punto preocupante para muchos ciudadanos en Tuxtla Gutiérrez, ya que el servicio que presta la empresa Veolia ha sido muy malo e impuntual.
Ante estas peticiones ciudadanas, el presidente de la capital chiapaneca, Ángel Torres Culebro, dio a conocer en exclusiva que ya se hizo una adquisición de equipo personal para poder agilizar la recolección de estos desechos, ya que derivado de la situación migratoria, ha aumentado la basura en la ciudad.
“Precisamente, en la sesión del consejo consultivo ciudadano, se dio a conocer la gran cantidad de basura que ha ido incrementando por el fenómeno migratorio y entre otras cuestiones. Por lo que, se hizo la adquisición de equipo adicional para poder atender esta problemática y próximamente, se estará informando hacia la ciudadanía”, acotó.
Aseguró que, se van a comprar 10 unidades adicionales entre vehículos pequeños y camiones recolectores de basura para poder atender una totalidad de 800 toneladas que se producen actualmente cuando anteriormente, estaban visionadas cerca de 600 toneladas.
Recalcó que, debido al deficiente servicio de recolección de basura que ha realizado la empresa Veolia en Tuxtla Gutiérrez, se revisará el contrato y las cláusulas para poder llevar a cabo las acciones correspondientes.
“Actualmente, aún la empresa Veolia se encargará de realizar la recolección de la basura al existir un contrato vigente, pero se va a revisar bien las cláusulas porque ha habido un decremento en el servicio; lo cual ha molestado a la ciudadanía al no cumplir con su trabajo correspondiente y se tomarán a cabo las acciones que se deban de tomar”, expuso.
Dijo que, más adelante, el Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez podría encargarse de realizar esta acción sanitaria cuando haya culminado el contrato en 2026. Sin embargo, se han revisado las condiciones que de tal forma realizan el servicio.
Por su parte, Francisco Antonio Rojas Toledo, octavo regidor del Ayuntamiento, comentó que, como forma de protesta, ha habido casos en donde los ciudadanos han quemado los contenedores de basura ante la falta del servicio de recolección.
“Estoy muy preocupado porque hay mucha inconformidad por parte de la ciudadanía y me han informado que se han quemado cerca de cinco contenedores como forma de protesta y realmente, la recolección de basura ha sido de lo pésimo… y hay mucha deficiencia por la falta de limpieza de los contenedores”, finalizó.