Opinión y propuesta
Mtro. Andrés Vázquez López
El pasado 13 de mayo, en la ya tradicional conferencia de prensa mañanera, el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval González, presentó una serie de datos sobre lo que él llama el “Índice de Letalidad”. Para mayor referencia se incluye la liga del video correspondiente.
El índice explica cuatro variables. La primera de ellas es el número de agresiones que han sufrido las Fuerzas Armadas (FFAAMM) cada año, desde diciembre de 2006.
La segunda variable se refiere al número de civiles fallecidos, como producto de tales agresiones.
La tercera hace alusión al número de civiles heridos y detenidos en dichos encuentros.
Finalmente, la última variable es el Índice de Letalidad, que sin haberlo explicado el secretario, se entiende que es el resultado de las tres anteriores.
Si sigue nuestra columna, amable Lector, sabrá que nos gustan los números, porque dejan poco espacio a la interpretación personal, dicen la verdad y la dimensionan. Y si los datos que presentó el secretario Sandoval son ciertos, entonces puede observarse cómo han evolucionado las agresiones a las FFAAMM desde el sexenio de Felipe Calderón hasta la fecha. Claramente se observa una tendencia alcista de este fenómeno al inicio de aquél gobierno, que se pronuncia a partir de 2008, para alcanzar su clímax en 2011, con 1,412 civiles fallecidos y 1,127 heridos y detenidos, en 1,076 agresiones; solamente ese año; a partir del cual el fenómeno presentó un franco decremento que se mantuvo hasta 2016, con 208 agresiones; cuando nuevamente comenzó a repuntar, ya en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Tras un leve aumento, al tomar el poder el actual gobierno de López Obrador, se presentó un pequeño pico, llegando a las 472 agresiones, con saldo de 298 civiles fallecidos y 486 heridos y detenidos en su peor momento hasta la fecha, que fue en 2020. Muy lejos del pico calderonista de hace once años, donde hubo más del doble de agresiones, más de cuatro veces el número de muertos y más del doble de heridos y detenidos. Cabe destacar que según la misma medición, a partir de 2020, el índice va en bajada.
Con base en estos números y en la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza, que como menciona el propio secretario Sandoval, establece la gradualidad que debe observarse para responder a una agresión, ¿cómo puede el ex presidente Calderón hablar de humillaciones a las FFAAMM? ¿Qué honor hay en que militares ataquen a civiles, que si bien los persiguen; no les están disparando? (Véase la segunda liga adjunta) ¿Qué no le fueron suficientes los más de 250 mil muertos en su sexenio? O para quedarnos con los datos del Ejército, ¿qué no se le ocurre pensar que hubo miles de civiles inocentes muertos durante su mandato, únicamente porque las FFAAMM tomaban las armas como primera opción de respuesta? Parece que sus años en el Gobierno y posteriores, no le han alcanzado para idear soluciones que tengan como resultado menos fallecidos, a quienes, por cierto, tampoco lo hemos visto ni consolándolos ni apoyándolos.
Además, opino que es necesario e importante, generar políticas públicas educativas, en relación al cuidado, protección y preservación del ambiente. Adicionalmente, expreso mi solidaridad con las familias de las mujeres que han sido violentadas en nuestro país y me uno a su exigencia de justicia para ellas.
