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Mtro. Andrés Vázquez López

El profundo sentido del deber

En menos de diez días, el mundo entero hemos visto la muerte de dos grandes personalidades que marcaron el siglo XX y parte del XXI; no sólo con sus decisiones sino también con su personalidad y ejemplo.

El pasado 30 de agosto falleció Mijaíl Gorbachov, último líder de la también extinta Unión Soviética, URSS. Y apenas el 8 de septiembre, perdía la vida la reina Isabel II del Reino Unido, RU. Pero, ¿en qué se parecen? Pues desde nuestro humilde punto de vista, la principal semejanza entre ellos, es su profundo sentido del deber.

Por un lado, Gorbachov en su momento, se dio cuenta que la URSS, debía renovarse o de lo contrario desaparecería, como de hecho sucedió. Sin embargo, primero intentó que ello no ocurriera. Este intento se materializó en dos grandes reformas, la perestroika, que se traduce como reconstrucción y que buscaba relanzar la economía soviética; y las glásnost, que se traduce como liberalización y que se enfocaba en la democratización de su sistema político. Con estos dos enfoques, Gorbachov buscaba occidentalizar a la URSS. De haberlo logrado, quizá hoy dicho país aún existiría, pero en una versión más compatible con el estilo de vida occidental y no habría horrores como la actual guerra en Ucrania. Desafortunadamente no fue así. Y entonces, al darse cuenta que la URSS se desmembraba, todavía tuvo la fuerza y la habilidad para lograr que dicho proceso fuera lo más pacífico posible y que de éste, nacieran con el menor dolor, la Rusia actual y otras 14 naciones independientes. Con ello, Gorbachov cumplió dos veces su deber para con su país. Primero para con la URSS al tratar de salvarla y adaptarla a la nueva realidad de finales del siglo pasado y de lo que va de éste. Y después para con Rusia, al gestionar su resurgimiento como nación independiente y al buscar que ello fuera sin derramamiento de sangre. Al considerar su misión terminada, se retiró de la vida política.

Por su parte, Isabel II asumió el trono de su país en la época de la posguerra, lidereando la reconstrucción del RU, a la par que simpatizó, impulsó y promovió el desmantelamiento, también pacífico, del antiguo Imperio Británico, para sustituirlo por la Comunidad Británica de Naciones, a la cual pertenece el propio RU y otros 53 países independientes, que alguna vez formaron parte de aquél. Hacia dentro del RU, Isabel II se convirtió en una especie de símbolo viviente de la britanidad, encarnando los valores más profundos de su país y cumpliendo a la perfección su papel de Jefa de Estado que busca representarlos a todos. Su pueblo la llora, porque siente que ha perdido a su mejor embajadora y a una figura que en las buenas y especialmente en las malas, los unía.

Ambos liderazgos se extrañarán, porque fueron personas dispuestas a cumplir su deber sin importar las críticas. Al ruso, muchos de sus compatriotas lo tildan de traidor y lo culpan del colapso soviético que quiso evitar. A la británica la tachan de ser una figura anacrónica y antidemocrática. Pero lo cierto es que guste o no, sus países no serían lo que son hoy, ni habrían salido adelante, si no hubieran contado con ellos.

Además, opino que es necesario e importante, generar políticas públicas educativas, en relación al cuidado, protección y preservación del ambiente. Adicionalmente, expreso mi solidaridad con las familias de las mujeres que han sido violentadas en nuestro país y me uno a su exigencia de justicia para ellas.

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3 Comentarios

  • Adrián Sotelo 17 de septiembre de 2022

    Ambos sin duda demostraron un liderazgo dignó de observación, en el que sin duda por su historica ubicación mediática difícilmente podría ser , dicho liderazgo, del beneplácito de propios y extraños. Personalidades históricas que sin duda serán recordadas por generaciones. Saludos Andrés.

  • Juan Carlos 17 de septiembre de 2022

    Excelente artículo.

  • Jorge Flores 18 de septiembre de 2022

    Muy buen punto de análisis sobre la verdadera vocación de servicio y el doble deber de servir.
    Leer este artículo me deja clara la idea del liderazgo y servicio.

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