• Una simulación la raquítica presencia de agentes en el río Suchiate para seguir tapando la red de corrupción, denuncian activistas y migrantes
José Cancino / Tapachula
El Instituto Nacional de Migración (Inami) simula que vigila las márgenes del Río Suchiate, para evitar el ingreso de migrantes que conformen una nueva caravana.
La tarea de supuesta vigilancia, que se da con menos de 10 elementos migratorios, llega justo cuando las críticas hacia el gobierno mexicano endurecen en la comunidad internacional por el trato impropio a los extranjeros, que han denunciado anomalías, vejaciones y corrupción por parte de agentes del Inami y altos funcionarios.
Mientras esta efervescencia política/social se da en la frontera sur, migrantes instalados del lado de Tecún Umán han anunciado la posible salida en caravana, lo que implicaría el cruce del Río Suchiate y su arribo a Ciudad Hidalgo, donde buscarían agregar a los cientos de extranjeros que están varados allí para encaminarse en su ruta hacia Tapachula.
Aunque el Inami continúa con el traslado de migrantes hacia la capital Tuxtla Gutiérrez, las denuncias por la supuesta venta de espacios en autobuses en la constante en los pasos informales donde el gobierno mexicano recaba la información de los solicitantes de permisos de tránsito por México.
Incluso, muchos agentes intimidan a activistas y periodistas si se intenta documentar el traslado de los extranjeros, con la finalidad, según han dicho los mismos denunciantes, que no se documente esta red de corrupción que adinera a los elementos del Inami.
La raquítica presencia de agentes migratorios en la ribera del Río Suchiate, es parte de la simulación que está dependencia federal mantiene para seguir operando la red criminal que han formado, denunciaron activistas defensores de migrantes, que exigieron al gobierno mexicano castigar a los implicados en acabar con el dinero y las aspiraciones de los migrantes en su ruta hacia la frontera norte.