Dr. Jorge Alberto Rincón Acebo Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
Que agraves a consecuencia del coronavirus, es influido por el estado de ánimo, que incide en las glándulas suprarrenales.
Trascendamos el nivel de cuando aprendes a vivir, vas a morir.
Reactiva tu sistema inmunológico. ¡Enumera tus privilegios!
¡No pasas hambre!
¡Conservas los sentidos!
¡La movilidad!
¡El raciocinio!
¿Acaso no has tenido el privilegio de tener tus sentidos, movilidad y llegar a razonar?
Desear ver sin exclusiones.
¿Con qué sentido te llenas de desasosiego? Trabajas para hacer dinero y con la pandemia ha demostrado ¡que no es suficiente para sobrevivir!
¡Inutiliza al miedo! ¡Es tu enemigo! La Esperanza incumplida se transforma en sufrimiento superlativo (1).
Tu mayor bien, es la salud. ¡Refuérzala! ¡No te dañes!
Lo social influye en que la atención por la pandemia se diluya. En la ciudad, los inicialmente afectados fueron los que realizan trabajos presenciales.
El campo ha sido meno afectado por el coronavirus, aunque las medidas higiénicas no se apliquen. No es productivo, se desmanteló la producción agraria en los 90’s, entregando la seguridad alimentaria a la banca mundial, se adquiere hasta vegetales en un país que su riqueza se finca en su biodiversidad. Si el gobierno no invierte en el campo y genera políticas públicas que incrementen la inversión, no hay producción. Refieren que si el gobierno no invierte, el pueblo no come (2). Independientemente, se debe producir para comer, sin esperar que el estado te refuerce, pero que sí impida el acaparamiento. La vida citadina ha desvinculado al humano de la vida vegetal y animal, los jóvenes piensan que la carne surge envasada, aún muchos evaden saber cómo se realiza la matanza de los animales con los que se alimentan. El tiempo que se lleva para producir alimentos, es superado por la rapidez con que se ingieren. No hay ni límite ni llenadera, en consecuencia la población es obesa.
Además, se le mantiene en la ignorancia, en el analfabetismo funcional, en la incapacidad de diferenciar de la mentira aparente y la realidad incómoda.
¡No es privativo de México, es mundial!
Referencia
1.- Montero Rosa. Historia del rey transparente. Página 494.
2.- Hernández Zenteno Rafael. 25 de mayo, 2021.