Ainer Marroquín / Diario de Chiapas
En la delegación tuxtleca del Instituto Nacional de Migración (INM), son entre 90 a 100 ciudadanos extranjeros los que acuden al día para solicitar residencia temporal o permanente en México.
En los últimos días, la afluencia de migrantes que esperan obtener sus documentos de regularización en el Instituto Nacional de Migración de Tuxtla Gutiérrez, ha incrementado y con ello, las denuncias.
Esta situación afecta a todos y todas por igual, comentó Luis Alonso Rivera, migrante de Honduras, ya que los que buscan tramitar su residencia o extender su periodo son tratados por igual.
Por lo anterior, indicó que quienes por primera vez van a tramitar o quienes ya cuentan con algún permiso, pero sólo necesitan renovación tienen que realizar los mismos procedimientos burocráticos.
“Tenemos este papeleo que migración nos ha dado desde la fecha 30 septiembre, dijeron que nos iban a mandar un correo, no ha caído el correo”, dijo.
Además, hay quienes acuden con menores de edad, algunos todavía en brazos y se quedan a dormir durante días para no perder sus lugares y ser atendidos lo más pronto posible, apuntó Melvin Alexander, migrante de El Salvador.
“Solo está atendiendo a 50 personas, hace casi 15 días, se quedaron sin sistema porque supuestamente hicieron cambio de personal”, lamentó.
Cabe recordar que durante los últimos meses, el personal del Instituto Nacional de Migración ha mantenido el aplazamiento de cientos de trámites de migrantes caribeños y centroamericanos, que solicitan residencia temporal o permanente en México.
Los trámites que deberían quedar resueltos entre 20 a 45 días hábiles (tres meses), demoran hasta un año, incluso sólo para obtener una cita, quienes la solicitan deben esperar entre cuatro a seis meses.
Esta es la situación que miles de migrantes deben pasar al solicitar ante el Instituto Nacional de Migración, la tarjeta de Residente Temporal o de Residente Permanente, que es el documento oficial del extranjero con el que prueba que se encuentra legal en el país, ya sea viviendo, trabajando o estudiando.
Incluso quienes ya tienen este documento y desean renovarlo, enfrentan obstáculos y demoras que ponen en riesgo su estadía legal en el país.
