Por la Conciencia
Dr. Roger Heli Díaz Guillén
- Radiografías cuantitativas y focos rojos
Como marco contextual referencial destacamos que las tierras ejidales y comunales conocidas como propiedad social en México ocupan más de la mitad del territorio nacional, existiendo 32 mil 261 ejidos y comunidades, de los cuales 30 mil 520 se encuentran certificados y documentados los derechos colectivos e individuales en un periodo de 32 años, que representa un avance del 94.61% del total nacional de núcleos agrarios; observándose en las últimas dos décadas un proceso de afectación a la propiedad social donde a febrero del 2025 poco más de cuatro millones de hectáreas han dejado de ser propiedad de núcleos agrarios convirtiéndose en propiedad privada, mediante el procedimiento de dominio pleno de tierras ejidales parceladas.
Para abordar este tema de la depredación de las tierras de propiedad social por parte de los capitales y particulares, delimitamos que el dominio pleno es un procedimiento establecido en la ley agraria de febrero del 1992 actualmente vigente, que hoy ante el avance e impacto del dominio pleno en tierras ejidales en varios Estados es un tema político, económico, social y de seguridad nacional prioritario ante las diversas denuncias de acaparamiento de tierras y nuevos “latifundios” basado en el despojo de tierras a pueblos campesinos e indígenas, siendo alarmante el dato que en el gobierno de Enrique Peña Nieto poco más de un millón de hectáreas ejidales pasaron a la iniciativa privada cambiando su régimen de propiedad; más de dos millones en los dos sexenios panistas; sumando al día de hoy más de cuatro millones de hectáreas que dejaron de ser sociales para transformarse en propiedad privada.
Este tema es un foco rojo en Estados del norte y centro del país que será materia de investigación ordenado públicamente en mañanera por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo; derivando sin lugar a dudas revisar la actuación institucional en los procesos de dominio pleno y el marco jurídico necesario a fortalecer donde pondere el criterio de “necesidad extrema” para los dominios plenos y no disponibilidad general en todas las tierras ejidales y comunales parceladas, estableciendo los candados necesarios y plena vinculación a la libre determinación en tratándose de tierras ejidales y comunales de pueblos y comunidades indígenas.
Para dimensionar el impacto del dominio pleno y depredación de la propiedad social revisamos información del órgano registral responsable del control y expedición de títulos de propiedad derivado de acciones de dominio pleno en tierras parceladas de propiedad social con corte a febrero del 2025; destacando los bloques de Estados que concentran la mayor superficie de propiedad social; los Estados con el mayor número de núcleos agrarios con acuerdos de dominio pleno en parcelas; los Estados con mayor número de parcelas con dominio pleno; los Estados con mayor número de superficie de dominio pleno y; los Estados con menor impacto del dominio pleno.
Una primera radiografía indica que en doce Estados que representan el 36.36% del total se concentran 19 mil 52 núcleos agrarios que representan el 59% del total nacional, siendo estos Veracruz con 3 mil 534; Chiapas con 2 mil 719; Michoacán con un mil 719; Guanajuato con un mil 514; Jalisco con un mil 362; Tamaulipas con un mil 353; San Luis Potosí con un mil 242; Sinaloa con un mil 203; Puebla con un mil 29; Guerrero con un mil 24; Estado de México con un mil 18 y; Durango con 983 núcleos agrarios; destacando el dato que el dominio pleno en tierras ejidales llegó con el gobierno de Felipe Calderón a una superficie de 2 millones, 686 mil, 578 hectáreas; creciendo esta cantidad con el gobierno de Enrique Peña Nieto a 3 millones, 753 mil, 408 hectáreas, con un crecimiento promedio por año de 166 mil hectáreas. Promedio que en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se redujo a 48 mil hectáreas de dominio pleno por año, sumando un total histórico de superficie de propiedad social a privada de 4 millones, 46 mil, 119 hectáreas en el año 2024.
Una segunda radiografía precisa a los diez Estados con mayor número de ejidos (4, 174) que han acordado otorgar a ejidatarios el dominio pleno de parcelas que representan el 60.23% del total de núcleos agrarios con dominio pleno (6, 929), encabezando este bloque el Estado de Veracruz con 901 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 31 mil 8 certificados parcelarios que amparan una superficie de 170 mil, 189 hectáreas; seguido de Guanajuato con 725 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 34 mil 514 certificados parcelarios que amparan una superficie de 98 mil, 624 hectáreas; continua Jalisco con 438 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 17 mil 52 certificados parcelarios que amparan una superficie de 92 mil, 455 hectáreas.
Le sigue en este orden el Estado de Michoacán con 395 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 12 mil 19 certificados parcelarios que amparan una superficie de 32 mil, 791 hectáreas; continuando con el Estado de Sinaloa con 333 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 10 mil 187 certificados parcelarios que amparan una superficie de 102 mil, 391 hectáreas; seguido de Puebla con 328 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 20 mil 685; se suma Coahuila con 321 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 15 mil 270 certificados parcelarios que amparan una superficie de 572 mil, 578 hectáreas.
Cierra este listado el Estado de Tabasco con 261 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 9 mil 661 certificados parcelarios que amparan una superficie de 56 mil, 668 hectáreas; Tamaulipas con 247núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 8 mil 370 certificados parcelarios que amparan una superficie de 123 mil, 849 hectáreas y; con el Estado de México con 225 núcleos agrarios que han autorizado sus asambleas el dominio pleno de 21 mil 867 certificados parcelarios que amparan una superficie de 25 mil, 909 hectáreas.
Este primer pasaje del impacto del dominio pleno nos ilustra que en una tercera parte de los 32 Estados se concentra más de la mitad de la propiedad ejidal y comunal de México; conociendo que al igual en una tercera parte de los 32 Estados se concentra más de la mitad de los núcleos agrarios que han acordado en asamblea el dominio pleno sobre parcelas en México, que en lo general son los mismos en ocho de estos; resaltando de estos datos que el impacto mayor del dominio pleno atenta a ocho Estados del centro y norte del país de los doce que concentran el mayor número de núcleos agrarios en el territorio nacional.