“Un artista es un alquimista que instiga emociones”
Jorge Éver González Domínguez / Chiapa de Corzo, Chiapas
Originario de la CDMX. Llega a Chiapas en 1979.
Caricaturista político desde hace 30 años, ha publicado en diferentes periódicos estatales, actualmente su trabajo puede verse en televisión abierta: Canal Trece, desde hace diez años.
Alberto “Binxghava” Villanueva, es felizmente “calavera” y promueve esta tradición en Chiapa de Corzo desde hace veinticinco años, además practica el arte de Payaso y Bufón desde 2008.
Al artista se le encuentra en diversos eventos donde se vierta la promoción del arte y la cultura.
“El dibujo me ha acompañado desde siempre, nací con ese talento, he realizado garabatos desde que tengo memoria. Mi búsqueda como creador es compartir coincidencia y provocar alguna emoción en el espectador, por eso mi trabajo ha servido en primer lugar para sentirme bien conmigo, luego ofrecer un punto de vista a los espectadores sobre lo que sucede en el mundo, aprovechando la vitrina que otorga estar en los medios de comunicación y reafirmar día a día mi sitio dentro del género periodístico de opinión, en el área de la caricatura política y consolidar mi lugar en la historia del periodismo Chiapaneco.
Por otro lado, respecto al arte, considero que éste ocupa un papel muy importante, pues es el que le da color a nuestro país, a pesar de las migajas que le otorgan quienes deberían impulsarlo adecuadamente”.
¿Qué significa la disciplina en la creación artística?
“Es un arma de doble filo, te acaba de impulsar o te hunde, el proceso artístico se forja en el interior del ser humano y no es lógico: es sutil, no es de horarios ni fórmulas.
En la mercadotecnia del arte es un elemento indispensable, porque no todos los artistas somos buenos vendedores o buenos artistas. Poner orden creativo es de mente lógica, un artista es un alquimista que instiga emociones”.
¿Qué papel podría desempeñar el arte y la educación en un país para el bien de su cultura?
“Un buen papel, ya que el arte otorga a un pueblo identidad; por eso, museos importantes enclavados en Francia, Inglaterra o en alguna parte del mundo, roban arte de otros pueblos para poder tener, aunque sea prestada, identidad”.
Binxghava, considera que la escuela no prepara para ser un humano realmente útil, que de un buen dibujante espera honestidad y libertad en el trazo, ya que el estilo propio lo otorgan los años.
Para el caricaturista, lo más entrañable en su vida ha sido saber que hay seres humanos pendientes de él y de su trabajo. Desea que lo recuerden de repente, pero no es algo que le quite el sueño, ya que es el tiempo quien coloca a todos en su justo sitio.
Siempre revestido de arte, se le ve caminando por calles de cartones sostenidas con críticas en vilo.
