Acusan tráfico de influencias

Enrique Buenrostro/ Diario de Chiapas
El pasado 24 de febrero de 2022, aproximadamente a las 4:48 horas de la madrugada, tuvo lugar un hecho de tránsito, a la altura del Instituto Tecnológico Regional de Tuxtla Gutiérrez, en el que intervinieron un vehículo marca Pontiac, modelo 2007, color rojo, con placas de circulación DPH5188 particular del Estado de Chiapas, y un Nissan tipo versa, color blanco con amarillo, modalidad taxi, modelo 2016, con placas de circulación 9526BHH, particulares del Estado de Chiapas; y otro vehículo.
El vehículo uno era conducido por Manuel Alejandro Than Palacios, y el vehículo dos por Carlos Morales Estrada (iba acompañado de su esposa Oxaida Esquinca Jiménez).
De acuerdo al dictamen que obra en la carpeta de investigación 0069-101-0206-2022, tramitada ante la Fiscalía del Ministerio Público Zona Poniente, Unidad de Atención Temprana 03, de la Fiscalía de Distrito Metropolitano, a cargo de la licenciada Kenia Hilerio Flores, el responsable del hecho de tránsito fue el conductor del vehículo (1) marca Pontiac, modelo 2007, color rojo, con placas de circulación DPH5188 particular del Estado de Chiapas.
Sin embargo, no obstante que dicho conductor iba en completo estado de ebriedad (los datos de prueba así lo demuestran), nunca pisó los separos de la policía, tampoco el médico legista asentó en su dictamen el estado etílico en que se encontraba; mientras que los ocupantes del vehículo (2) fueron internados de emergencia en un hospital privado de la ciudad capital.
Hasta la fecha el citado Manuel Alejandro Than Palacios no ha pagado al señor Carlos Morales Estrada los daños ocasionados por el accidente, que comprenden los gastos por las lesiones que se le ocasionaron tanto a él como a su esposa, a quien le realizaron dos cirugías urgentes, y los gastos de hospitalización; lo cual asciende aproximadamente a la suma de 600 mil pesos moneda nacional, por la reparación integral del daño, y porque era la única fuente de ingresos que tenía como taxista.
Mientras el delincuente Manuel Alejandro Than Palacios continúa embriagándose en los antros de esta ciudad, pensando que tiene la conciencia limpia. Se tiene conocimiento que el delincuente de marras ejerce la profesión de médico cirujano plástico.
Todo lo anterior, con la complacencia y colusión de las autoridades que intervinieron desde el momento del percance. “¡Ya basta!, exigimos justicia para esa familia, que quedó en la miseria por culpa de ese briago e influyente”.