Silvano Bautista I./ Diario de Chiapas
“Morena tiene varias crisis que nos coloca en el momento que estamos, la primera de ellas es su dirección, pues las dirigencias provisionales que ha tenido el partido nada más han tenido una lógica gerencial más allá de una visión de institución en el gobierno y no han entendido su responsabilidad”, aseguró Flavio Sosa Villavicencio, aspirante a la Secretaría General del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena.
Descartó que de llegar a la Secretaría General del CEN de Morena vaya a impulsar cualquier alianza con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
El también activista y luchador social oaxaqueño consideró que las dirigencias no han dejado que el partido sea una herramienta a favor de la sociedad y se ha convertido en una escalera electoral, lo cual tiene gran responsabilidad.
Durante una conferencia de prensa, previó una reunión con sus simpatizantes y enfatizó que la segunda crisis en el partido es de identidad, pues Morena llegó a la presidencia bajo la influencia de las distintas luchas históricas de México, pues representa y simboliza la lucha de los estudiantes mexicanos por las libertades, la democracia y la gratuidad de la educación.
“Sintetiza la lucha de los campesinos por la defensa de sus pueblos y recursos naturales, también la de los campesinos por sacudirse los yugos de opresión que históricamente han estado sometidos”, abundó.
Afirmó que Morena es la síntesis de esas luchas y representa la batalla de los maestros, de los petroleros por sacudirse del sindicato de trabajadores y de su líder que los ha saqueado en administraciones anteriores por vencer el corporativismo sindical.
“Morena representa los anhelos de justicia en México, también la lucha de pueblos y comunidades por su autodeterminación, el vínculo con el pueblo mexicano”, agregó.
Sin embargo, opinó que las dirigencias provisionales no entendieron ese mensaje de la sociedad y se dedicaron a administrar la dirigencia del partido, a asociarse en una maraña de intereses y por eso hay una crisis de identidad de Morena y que debería de ser un partido de izquierda, “por eso nosotros decimos que hay una crisis de dirección y de identidad política”.
A decir suyo, no están funcionando las estructuras del partido.
