Seguirá cerrado el acceso a Toniná

Marco Alvarado/ Diario de Chiapas
El acceso a la zona arqueológica de Toniná, en el municipio de Ocosingo, seguirá cerrado hasta que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Instituto de Administración de Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin) y José Alfonso Cruz Espinosa, dueño del rancho San Antonio Toniná, en donde se ubica este asentamiento de la cultura Maya, estén de acuerdo con el avalúo y los pagos que corresponden a la propiedad.
José Alfonso Cruz Espinosa se presentó este martes al Centro INAH Chiapas para darle seguimiento al proceso, del que ya tiene conocimiento el director general de este instituto, Diego Prieto Hernández, y reiterar su llamado al gobierno federal, para que resuelvan este problema, que ha ocasionado el cierre del único acceso a esta zona arqueológica en los últimos cinco meses.
Sobre esta situación, reclamó un pago justo y actualizado, a partir de una valuación correcta, y no como la última de la que tuvo conocimiento, que bajó el valor de su rancho reduciéndolo a “un potrero”.
El antiguo asentamiento Maya de Toniná, en donde está la que es considerada la pirámide más alta de esta cultura en nuestro país, se ubica a unos 10 kilómetros de Ocosingo, y desde hace cinco meses no puede ser visitado por los turistas debido a este problema.
“Le pido al presidente López Obrador que intervenga porque este cierre afecta también a las familias de quienes viven del turismo, y los turistas se molestan porque no pueden ingresar a la zona arqueológica”, enfatizó.
Por este desacuerdo en este momento sólo puede ser visitado el Museo de Sitio, detrás del cual se ubica el único acceso a la zona arqueológica, camino que atraviesa la propiedad de Cruz Espinosa quien, aseguró, ha recibido la propuesta de ser indemnizado con los ingresos que se generen por el cobro a los turistas, sin embargo, un reciente avalúo bajó el valor de su propiedad, y sólo pretenden cubrir lo correspondiente a los años 2014 al 2022, cuando el INAH lleva más de 40 años administrando esta zona.
“Anteriormente, en 2010 y 2012 el INAH realizó avalúos en la zona que distan mucho de lo que ahora consideran”, y aunque se reservó detallar cantidades, recordó que es la autoridad federal la que debe establecer la indemnización que corresponde a su rancho, porque el enclave Maya es patrimonio de la nación.
También aclaró que ni él ni su familia han recibido algún pago, por lo que sólo reclama lo que considera justo y lo que corresponde a la compra de un rancho de ocho hectáreas, situación que el gobierno federal había prometido resolver en el año 2021.