José Cancino / Tapachula
Turistas locales saturaron este fin de semana el mirador “El Posito”, localizado en el ejido Córdova Matasanos, en el municipio de Unión Juárez.
Este sábado y domingo, el lugar donde fue construida una mano haciendo referencia a un ser imponente, que cobija a las personas mientras posan para sus fotografías, lució abarrotado y sin las medidas sanitarias pertinentes para evitar contagios de COVID-19.
Provenientes de municipios como Tapachula, Tuxtla Chico, Cacahoatán y demás, los visitantes se aglomeraron debido a la intensa lluvia que cubrió a la zona montañosa, generando un fuerte foco de infección por el letal virus.
En el lugar no existe ningún protocolo sanitario para poder ingresar y permanecer en este sitio, que fue construido por ejidatarios y el propietario de la vivienda al pie del amplio escenario natural.
Incluso, para llegar desde las calles del ejido hasta este punto, se tienen que caminar unos 700 metros, convertidos en zonas de riesgo por piedras, lodo y pendientes que hay que escalar con mucha precaución.
El lugar ha sido anunciado y visitado por muchas personas, sin embargo, los encargados de permitir el acceso a esta mano de concreto, han señalado a través de redes sociales que el lugar aún no está inaugurado, lo que evidencia que es mucho más peligroso escalar y llegar hasta allí.
Laura, una de las asistentes, tuvo que regresar por donde vino porque la fila era interminable y no pudo realizar el arribo a esta mano.
“Me voy de regreso porque no pude ascender y menos con esta lluvia. Están cobrando 30 pesos a los adultos y 10 a los niños”, expuso.
Hasta ahora, ninguna autoridad ha certificado el sitio como un lugar seguro.
