José Cancino/ Tapachula
La caravana migrante se ha debilitado más, luego de que autoridades guatemaltecas y el ejército lograran dispersarla y reabrir la circulación en la vía carretera que mantenían bloqueada en Vado Ancho.
Los hondureños pasaron de ser seis mil a cuatro mil, aproximadamente, ya que unos mil decidieron retornar por propia voluntad a San Pedro Sula, a bordo de vehículos que proporcionó el Departamento de Migración y el gobierno de este país.
Las mismas autoridades migratorias informaron que ahora los migrantes se encuentran dispersos en esta localidad perteneciente al departamento de Chiquimula, donde han permanecido durante tres días.
También, el Ministerio de Salud señaló que 21 migrantes dieron positivo a covid-19, tras realizarse la prueba de antígeno que arrojó resultados positivos.
Hasta el momento, el muro militar persiste en esta parte de territorio guatemalteco, mientras que en la frontera entre Tecún Umán y Ciudad Hidalgo la presencia de la Guardia Nacional (GN) se mantiene, al igual que de elementos del Instituto Nacional de Migración (INM).
El gobierno guatemalteco señaló que no permitirá el paso de los extranjeros, que buscan llegar hasta Tecún Umán, mientras que el gobierno de Honduras pidió al presidente Alejandro Giammattei investigar las agresiones contra los ciudadanos hondureños.
La caravana migrante se nota debilitada, pero miles todavía se buscan llegar a México.
