Movimiento magisterial asegura que no claudican en sus protestas; lo mejor es que se obligó al gobierno a reanudar el diálogo, dice Sección 7 del SNTE
Ainer González / Diario de Chiapas
Luego de 28 días de intensas movilizaciones y manifestaciones en diferentes puntos de Tuxtla Gutiérrez, la Sección 7 del Sindicato y Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE-CNTE) determinó llevar a cabo un “repliegue táctico de su paro magisterial”.
Esta medida se toma en medio de un clima de creciente tensión y negociaciones con la Presidencia de la República.
El paro, que comenzó el 15 de mayo, fue impulsado por diversas demandas del gremio magisterial, entre las que destacan el rechazo a la reforma educativa, la exigencia de mejores condiciones laborales, y la solicitud de regularización de plazas para los docentes interinos.
A lo largo de estos 28 días, las y los maestros llevaron a cabo diversas actividades de protesta, incluyendo marchas, asambleas informativas y bloqueos intermitentes, generando un impacto significativo en la vida cotidiana de la capital chiapaneca, como lo fue la toma de la Terminal de Almacenamiento y Despacho (TAD) de Petróleos Mexicanos (Pemex), dejando a la población sin abasto de gasolina y diésel.
La decisión del repliegue táctico fue anunciada en una asamblea general celebrada por la mañana de este miércoles 12 de junio, en la que los líderes de la Sección 7 explicaron que, aunque las demandas no han sido completamente atendidas, han logrado avances significativos en las mesas de diálogo, afirmando que con las acciones colectivas que emprendieron en este casi mes de plantón, lograron que el gobierno volviera al diálogo, lo que ha fortalecido su organización.
“Prueba fehaciente de las distintas acciones de masa realizadas en esta lucha es que nuevamente el gobierno accedió al diálogo después de dirimir los temas nacionales, podemos concluir que los alcances políticos fortalecen la organización sindical independiente”, expusieron.
Los huelguistas destacaron que, entre los logros alcanzados se encuentran el compromiso del gobierno federal de revisar la situación salarial, de las plazas docentes, como las de mejorar las condiciones de las escuelas en las zonas rurales. Además, se estableció una comisión mixta para dar seguimiento a los acuerdos y asegurar su cumplimiento en un plazo razonable.
De tal forma, la comunidad educativa y la sociedad en general han mostrado una variedad de reacciones ante esta decisión. Algunos sectores aplauden el repliegue, considerando que posiblemente permita retomar las clases y normalizar las actividades escolares, mientras que otros expresan escepticismo sobre el cumplimiento de los acuerdos y la efectividad de las negociaciones.
A pesar del repliegue, la CNTE ha dejado claro que se mantiene en estado de alerta y no descarta retomar las movilizaciones si las autoridades no cumplen con los compromisos adquiridos. En las próximas semanas, se realizarán asambleas regionales para evaluar la situación y definir los siguientes pasos del movimiento magisterial.
