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Por falta de agua, retienen en Coita a funcionarios

Bruno Hernández/ Ocozocoautla

La falta de compromiso del alcalde Alfonso Estrada Pérez hartó a pobladores de una comunidad, quienes procedieron a la retención del director de Obras Públicas a fin de ejercer presión en el mandatario y que cumpla con su palabra de obra.

Y es que habitantes de la comunidad Nuevo Mezcalapa de esta localidad procedieron a rodear y posteriormente retener al José Luis Hernández López, responsable de la Dirección de Obras Públicas, debido a que no se les construirá el tanque elevado que les prometieron, además de que la bomba que les otorgaron no servía.

Los ciudadanos –molestos- expresaron que el alcalde había quedado formalmente de darle solución al problema de agua potable de su comunidad, en el cual el proyecto contemplaba una bomba funcional, un tanque elevado y reparación de tuberías.

Pero contrario a todo lo que el presidente les había informado, sólo repararon algunas cuantas tuberías, se les confirmó que no se les iba a poder construir el tanque elevado y les entregaron una bomba, que no cumple con la potencia para poder llevar agua a las familias.

Se supo que el director de Obras estuvo retenido desde la tarde del pasado martes y fue liberado hasta la madrugada de este miércoles, luego de que presuntamente funcionarios acudieran a hacer un compromiso para que se lleve una reunión con el alcalde y poder resolver la problemática.

LO INTERCAMBIAN POR AGUA

También en la comunidad El Espinal, la falta de agua potable en varios puntos de la localidad hizo que habitantes de la comunidad tomaran acción y retuvieran al director del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado Municipal (SAPAM), hecho que al menos les trajo resultados inmediatos pues para su liberación, intercambiaron pipas de agua y el compromiso de la reparación de la bomba que surte al poblado.

La mañana de este miércoles, autoridades se enteraron que en El Espinal tenían retenido al funcionario de SAPAM y algunos colaboradores, amenazando con amarrarlos si no acudía a negociar el presidente municipal.

Ante este hecho, tuvo que acudir el secretario municipal, Omar de los Santos Avendaño, para poder entablar un diálogo con los habitantes, quienes le exigieron agua potable toda vez que llevan casi un mes sin una gota de agua.

Fue así que los pobladores acordaron la liberación de los funcionarios tras la firma de un acuerdo, en donde el gobierno municipal se comprometía de dar pipas de agua a los habitantes mientras se componía la bomba que dota al poblado, dándoles un máximo de 15 días para que se reinstale el sistema y pronto pueda haber agua en sus tuberías.

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